Columnas

38 Mpios sin justificar 20 mil MDP

PRESENCIA

ANA LUISA GARCIA G.

            < Unas “joyitas” los exalcaldes

            < 38 Mpios sin justificar 20 mil MDP

            < 100 cajas de archivo, de Canturosas

La Auditoría Superior del Estado de la que es titular Jorge Espino Ascanio, empieza a dar color en lo que se refiere a la revisión de cuentas públicas del Gobierno del Estado, municipios y organismos públicos descentralizados, donde la inmensa mayoría incurrieron voluntaria o involuntariamente en omisiones, en asignaciones que recibieron y no realizaron la obra o el programa para el que se asignó. Tan sólo 38 de los 43 municipios tamaulipecos presentan observaciones que en forma global dan referencia a una suma de 20 mil millones de pesos correspondientes a 2015 y 2016.

Sin que existan cifras precisas en el caso del ejercicio del gobierno estatal se habla de mil millones de pesos del ejercicio de 2016, que se quedan pálidos al lado de los mil 300 millones que tendrá que justificar la exalcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar Vázquez y casi estaría igualando a los 900 millones de pesos que tiene que comprobar su destino el exalcalde de Nuevo Laredo, Carlos Cantú Rosas.

En el caso de municipios y de la administración estatal el ejercicio de 2016 lo concluyeron los alcaldes y el gobierno que están en funciones. Aunque sólo ejercieron tres meses de ese año, tienen la responsabilidad de rendir cuentas de los 12 meses.

LO MÁS DIFÍCIL ESTÁ POR VENIR, porque cuando la Auditoría Superior reciba la documentación de esos 38 municipios, la del Gobierno del Estado y además las del 80 % de los 106 organismos descentralizados que también están bajo cuestionamiento, no se van a dar abasto los auditores que operan bajo el mando de Espino Ascanio. Tan sólo Nuevo Laredo está enviando 100 cajas de papelería para el caso de la gestión de Canturosas.

Por otra parte, los emplazados a entregar cuentas de sumas debidamente acreditadas en las observaciones tienen 15 días hábiles para hacerlo; luego de ello y de acuerdo a lo que entreguen, la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior del Estado podrá dictaminar y pasar al pleno los casos que considere que estuvieron comprobados debidamente y los que no, los regresarán al Auditor Superior para que proceda a una nueva revisión más intensa y un nuevo requerimiento de comprobaciones.

Desde luego que hay una gran expectación sobre los resultados preliminares que habrá en este mismo año, dada la proximidad de la clausura de trabajos del Poder Legislativo en diciembre. Es la primera ocasión que se dan a conocer un número tan alto de observaciones, pero lo importante está en el desenlace que tengan.

EN LA DEVOLUCIÓN DE FONDOS…Tan sólo en Tampico la alcaldesa Magdalena Peraza Guerra acaba de dar a conocer que ha pagado el municipio durante su gestión 130 millones de pesos que no le correspondían, entre ellos 20 millones de pesos al SAT por impuestos de los trabajadores, más el 2 % de nómina; asimismo los aguinaldos porque no le dejaron esa suma y cubrir adeudos con proveedores. Además de 27 millones de pesos que tuvo que devolver al Gobierno Federal porque no se ejercieron, pero tampoco estaban en caja y no hubo más remedio que reembolsarlos para poder tener acceso a nuevos recursos.

Y ese fue el mismo caso de Tula, donde se desaparecieron 7 millones de pesos que envió la SEDATU para la construcción de 300 cuartos habitación, de los que sólo se construyeron 75.

Total, una “joyitas” los exalcaldes. Y en tela de duda están alrededor de 80 titulares y extitulares de organismos descentralizados, así como bajo la lupa y en serios cuestionamientos, ejercicios de las Secretarías de Obras Públicas, Salud, Educación y SEDESOL, hoy Secretaría de Bienestar Social.

PANISTAS DE TAMPICO DAN SU BRAZO A TORCER. En la arena azul de Tampico, todo pinta para que sea una opción ciudadana la que abandere la causa municipal en los próximos comicios, y no precisamente un elemento de la militancia panista. Donde manda capitán no gobierna marinero, de ahí la aparente conformidad de uno de los principales aspirantes, Germán Pacheco Díaz, Director General del ITIFE, a lo cual hay que agregar la óptica del dirigente del PAN en Tamaulipas, Francisco Elizondo que anduvo en la zona sur y de la propia presidenta del partido en el municipio Rosario González Flores, que no descartan una opción externa.

Con esto se fortalecen las posibilidades de Eduardo Hernández Chavarría, quien renunció al PRI recientemente.

Los dirigentes estatal y municipal, así como el propio Pacheco coinciden en señalar que el PAN tiene en su militancia, elementos con la capacidad para las dos candidaturas, la alcaldía y la diputación federal, pero que el perfil de esos candidatos los decidirán el Comité Ejecutivo Nacional y el Comité Directivo Estatal.

Quizá habría que recordar las palabras de Ricardo Anaya cuando vino a Tamaulipas a levantarle la mano al ahora gobernador (el día de las elecciones), ante el cual confirmó que serían los tamaulipecos panistas los que decidirían las candidaturas locales.

De cualquier manera hay un llamado a la militancia azul tampiqueña para que no se precipiten en un proceso que aún no está en tiempo de decidir, esto se estará dando quizá a finales de año.

Las opciones que vienen de otro partido, suelen darse por estrategia, quizá el PAN verá en este momento no sólo ganar, sino hacerlo con mayor captación de votos para que esto de alguna manera incida en los resultados nacionales de su candidato a la Presidencia de la República, incluso de la senaduría.

Tampico es desde hace tiempo bipartidista, de hecho no vota por partido, sino por persona. Eduardo Hernández Chavarría es un elemento que se ha mantenido muy cerca de las bases, del pueblo, de las clases populares. Él es egresado del IEST (Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas), un núcleo académico con tendencia panista, y el PAN en Tampico es ante todo un partido de la clase media y media alta, esto ofrece la oportunidad de una carta híbrida que puede dar una copiosa votación.

O dicho de otra forma, que el PAN gane en Tampico con mucha más ventaja de la que le ha separado en los últimos procesos de su principal adversario el PRI. Las victorias y las derrotas del PAN en Tampico se han dado con diferencia de alrededor de cuatro mil votos y en la última jornada electoral Magdalena Peraza Guerra se llevó la victoria por sólo 2,308 votos, pero además MORENA ha logrado construir una red importante de activistas jaibos  y es fácil pensar que superará en 2018 los 4, 371 sufragios logrados en los comicios de 2016.

Por eso el PAN seguramente busca una carta mixta que supere su voto duro, que si bien su captación de sufragios creció en el pasado proceso, se debió al impulso que le dio el candidato a gobernador, hoy sin ese motor tiene que encontrar otra fuerza capaz de darle un triunfo rotundo en cada municipio o distrito.