Columnas

Ambiente sostenible, del dicho al hecho.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

Ambiente sostenible, del dicho al hecho.

Aunque debemos reconocer, como lo hiciera el investigador Luis M. Jiménez Herrero en el año dos mil, que muchos países han hecho la tarea para reducir la contaminación y la degradación de recursos, la situación en lo general, empeora.

Los países desarrollados consumen el 76 por ciento de los recursos totales de materia prima y energía, pero, dejan a los países en desarrollo problema de escasez y de deterioro ambiental.

Es a partir de estos conceptos, como el término de desarrollo sustentable cobra auge en el mudo y se pone sobre las mesas de negociaciones para que las grandes empresas puedan responder por los efectos negativos que dejan al ambiente.

Esto nos lleva a pensar en lo dicho aquel 12 de junio por el Comandante Fidel Castro Ruz en la Conferencia de las Naciones Unidad sobre Medio Ambiente y Desarrollo, en el sentido de que, las sociedades de consumo son las responsables fundamentales de la atroz destrucción del medio ambiente, porque desde su punto de vista nacieron de las metrópolis coloniales y de las políticas imperiales, que engendraron el atraso y la pobreza que azotan a la humanidad.

Por aquella época, el termino de desarrollo sustentable pareció dar forma al llamado permanente de las organizaciones ambientalistas y de la ONU, para que el cuidado del ambiente se hiciera a partir de mantener el equilibrio natural que existió.

Si el hombre se sirve de la naturaliza y sus recursos para mejorar su calidad de vida y desarrollarse, debería dar oportunidad a la regeneración de los recursos, sin embargo, debido al crecimiento demográfico, las tendencias consumistas de materiales y energía, los globalización y el capitalismo, se rompió tal equilibrio entre hombre y naturaleza, para llegar a la sobreexplotación de los recursos naturales, con las consecuencias que todos sabemos contra la humanidad.

En esta semana del medio ambiente que hay en Tamaulipas y que contiene una serie de actividades relevantes, vale la pena considerar todos los factores que ya que, las repercusiones sobre la humanidad, aunque no se dimensionen, la realidad es que afectan la salud y dejan mucho que desear sobre el avance los niveles de desarrollo que puedan alcanzarse con una política lógica para la sustentabilidad del ambiente.

Ya hay quienes creen que los efectos del cambio climático, del agujero de la capa de ozono y la pérdida de biodiversidad, son facturas que el medio presenta a los ciudadanos, de ahí que ya podamos ver que la sociedad haga verdadera conciencia del problema que representa consumir los recursos de la naturaleza, más rápido de lo que esta pueda generarlos.

Revisar los esquemas de desarrollo sostenible, para la adopción de modelos sencillos y de alta efectividad, en los que participe toda la población, es lo prioritario, en el entendido de que las autoridades deben de hacer lo suyo, máxime, cuando tienen legislaciones avanzadas previstos de apartados con sanciones a quienes no cumplan con las Leyes.

Obvio, falta ser enérgicos en este punto, ya que, por dañar al ambiente y desde luego impedir el disfrute del mismo a la ciudadanía, en virtud de los intereses empresariales, nadie ha parado en la cárcel y muy pocos son multados por abusar del medio ambiente que les da la oportunidad de que sus factorías operen.

Este cinco de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente y, por tanto, es la oportunidad que todos debemos darnos para convertirnos en parte de la suma de personas que, mínimo hablen bien del ambiente y reclamen a quienes lo dañen.

Las alteraciones al medio ambiente, por lo regular equivalen a tirar la pedrada y esconder la mano, vamos a tirar los residuos y esconderse, dejar la basura en los sitios incorrectos y correr para que nadie vea, dejar los envases de agroquímicos en las márgenes delos ríos o presas esconderse, incluso, hasta salir de la ciudad basura en las camionetas y tirarla en las zonas ejidales, pero, salir den franca huida para evitar reclamaciones de los habitantes de los Ejidos.

Esto último se sabe, porque en el Ejido La Presa, de este municipio, una de las principales quejas de los habitantes, puesta de manifiesto en la encuesta realizada por estudiantes de la Universidad La Salle Victoria, fue en el sentido de que los que viven en la ciudad van y tiran su basura en los terrenos del Ejido y lo que es peor, muy cerca de la zona urbana de esa comunidad rural.

El estudioso del medio ambiente, Gro Bruntland, definió el desarrollo sostenible como, cuando se satisface las necesidades de la presente generación sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para que satisfagan sus propias necesidades.

En tanto, la FAO, consideró en 1992 que el desarrollo sostenible es conservar la tierra, el agua y los recursos genéticos de los reinos animal y vegetal y que, no degradar el ambiente es apropiado desde la perspectiva tecnológica, viable desde lo económico y aceptable desde lo social.

En el caso de Tamaulipas en lo macro y de Ciudad Victoria en lo micro, existen mil y un oportunidades para generar acciones ambientales que sean un ejemplo a seguir, de ahí que, el Gobierno de la entidad haya presentado una iniciativa para una nueva Ley de Cambio Climático, vía el titular del Poder Ejecutivo, Francisco García Cabeza de Vaca y que, los responsables del Ayuntamiento, que lidera el contador Oscar Almaraz Smer, dediquen desde el pasado fin de semana muchas horas de trabajo para hablar de la importancia que e la aportación de niños y jóvenes para el cuidado del ambiente.

Por cierto, no quedó claro si los directivos del Partido Verde Ecologista de México se acordaron que este cinco de junio es el Día Mundial del Ambiente, por aquello de que una buena parte de los votos que sacan, se debe a la apuesta de los ciudadanos a que, sus propósitos quedan más allá de lo político.

Quizá el país y Tamaulipas requieran de un partido ecologista que sea congruente al menos con su nombre.

Por aquello de la bicicleteada que se lleva a cabo en muchas ciudades de la entidad, pero, en especial la de esta capital, bien pudieron los organizadores, colocar luces verdes a las bicicletas en señal de que están a favor del ambiente  o que, en todas las escuelas de nivel básico, se hubiese recibido un oficio del Secretario de Educación, Héctor Escobar Salazar, en el que se conminara a los maestros ha hablar todo el día del ambiente y sus relaciones con la salud, la economía, el conocimiento y la vida.