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Ordeñadores

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Por Javier Terrazas

Ordeñadores

La infraestructura que tiene PEMEX en Madero y Reynosa para el procesamiento de crudo y producción de gasolinas, hace de Tamaulipas una entidad con ductos para el envío a otras regiones consumidoras.

El oleoducto de Madero a Cadereyta, es uno de los principales y por tanto, quizá, el más afectado por la práctica nociva de ordeña ilegal de combustibles.

Y desde hace algunos años, esas acciones en manos de los grupos delincuenciales del crimen organizado, asentados en cada una de las regiones.

Combatir a fondo éste delito en Tamaulipas, sería de manera indirecta un golpe severo a esas organizaciones.

En los reportes más recientes de Petróleos Mexicanos, nuestro estado aparece entre los de mayor incidencia con éste delito.

Ocupa en nada honroso tercer lugar, luego de Tabasco y Veracruz; seguido luego por  Nuevo León, Puebla, Estado de México, Guanajuato, Jalisco y Sinaloa.

Para darnos una idea  del tamaño del problema, en la última década, la paraestatal ha  denunciado 19,401 casos de robo de hidrocarburos en tomas clandestinas.

Y las quejas se han incrementado en forma alarmante, pues de 239 en el 2007, subieron a 3 mil 799 el año pasado.

Desgraciadamente, en esas acciones se han visto involucrados 144 trabajadores de Pemex, detenidos en 17 estados, 14 de ellos en Tamaulipas.

En Las acciones de combate a la ordeña o venta ilegal de combustibles, se han asegurado 460 propiedades.

Los números de las pérdidas son escalofriantes, pues tan solo del 2009 al 2014, Pemex  reportó pérdidas por 46,000 millones de pesos.

Para que usted se dé una idea de lo que representa,  supera lo que recibe Tamaulipas de presupuesto anual, pues por lo general apenas supera los 40 mil millones de pesos.

La deficiente atención de éste delito por parte del gobierno federal en las diversas regiones del país, la corrupción entre los trabajadores de PEMEX y la impunidad, ha elevado su incidencia en más del 2 mil 600 por ciento  del año dos mil a la fecha.

De ese tamaño ha sido el saqueo a la principal fuente de ingresos para el país por la vía de las “ordeñas clandestinas”,  a las que se debería de sumar los millonarios desvíos de funcionarios y sindicato por décadas.

Este delito, por tanto requiere no solo mayores penas que están analizándose en el Congreso de la Unión, sino el combate amplio y enérgico de las diversas autoridades.

En el caso de Tamaulipas, hace algunos lustros se vio involucrado en este tipo de acciones ilícitas un ex dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática, originario de Río Bravo.

Nada menos que Miguel Ángel Almaraz Maldonado, quien en el 2009 fue detenido por ese delito.

Ahora que estará en Tamaulipas Miguel Ángel Osorio Chong, habría que comprometerlo a que éste sea uno de los puntos de la agenda específica, don doble efecto positivo.

Por un lado se frenan pérdidas de PEMEX y por el otro, se frenan ingresos para los grupos delincuenciales.