Solidarios

Tribuna

Por Javier Terrazas

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En el estado de Durango, el gobernador de origen panista José Rosas Aispuro Torres, anunció que en solidaridad  con la población, que se verá afectada por el gasolinazo, canceló el cobro de la tenencia vehicular.

Una medida valiente porque también ese gobierno resentirá los efectos del incremento a los combustibles.

De acuerdo a los cálculos del mandatario, su administración dejaría de percibir 130 millones de pesos por ese concepto.

También dio a conocer que durante los tres primeros meses las personas morales que realicen los trámites de placas, es decir los derechos vehiculares, quedarán exentos.

La disposición del mandatario duranguense fue expuesta primero ante los empresarios de diversos sectores productivos, a quienes pidió que sus empresas si cumplieran con el pago de derechos vehiculares.

Sin duda es una forma de apretarse el cinturón por parte del Gobernador de aquella entidad norteña.

Una presión que sentía muy fuerte porque en los estados vecinos con quienes tiene mayor interacción, como son Chihuahua y Coahuila ya no cobran ese impuesto estatal.

Otro mandatario estatal que buscan de alguna forma mantenerse en el ánimo de la población en este contexto de escenario nacional complicado,  es el de Nuevo León Jaime Rodríguez.

Luego de la vapuleada que le dio la sociedad con la mega manifestación del jueves en donde le destruyeron vitrales y otro mobiliario del palacio de Gobierno, el gobernador anuncia que no subirá las tarifas del transporte urbano.

Una decisión muy riesgosa, porque si bien es cierto que la autorización depende del Gobierno del Estado,  tendría que platicarlo con los concesionarios, porque el gasolinazo dispara el costo de sus principales insumos.

En el caso de Tamaulipas, habrá que esperar unos días para ver la reacción del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca en éste sentido.

Ello  en virtud de que los días jueves y viernes estuvo atareado en Nuevo Laredo y Victoria con el asunto del asesinato de los cuatro servidores públicos de la Procuraduría General de Justicia del Estado en Nuevo Laredo.

La consternación y el duelo primero. La atención a los deudos de los acaecidos en el cumplimiento del deber.

Y es que fue un golpe doble porque en solo dos días se perdieron a elementos valiosos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, así como a importantes actores del Grupo de Coordinación Tamaulipas.

Se trata del Coordinador Estatal de la Policía Federal, Sergio Licona Gómez; del delegado del CISEN en Tamaulipas, Marco Francisco González Meza, y los oficiales de la Policía Federal  Teniente, Tito Jiménez Vázquez, y el oficial Macedonio Hernández Rodea.

Viajaban precisamente  para asistir a una reunión extraordinaria del GCT.

Una vez que pase la consternación y el duelo institucional, veremos si Tamaulipas sigue los pasos de Durango en materia de la eliminación del cobro de tenencia por solidaridad con la comunidad por el impacto del gasolinazo.