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ABANDONA IMSS Y EL SNTSS A LA ENFERMERA AIDÉ

POSDATA

GASTÓN ESPINOSA GLZ.

ABANDONA IMSS Y EL SNTSS A LA ENFERMERA AIDÉ

Aidé, se quedó sola.

La abandonaron sus jefas de enfermeras, su sindicato y el IMSS.

No le dieron un trato digno, a pesar de haberse contagiado del COVID-19 durante su labor como enfermera, en el Hospital General de Zona número 15 del IMSS, en Reynosa, Tamaulipas.

Aidé, fue enviada a atender a un paciente positivo a Covid-15, ella no protestó, fiel a su profesión acudió al llamado sólo que sin el equipo adecuado…días después comenzó a presentar síntomas, pero lejos de encontrar el respaldo de su jefa, Claudia Estrada, únicamente recibió indiferencia de ella. “Hasta que no tenga los síntomas graves se le pondrá en cuarentena”, le informó.

Un grupo de compañeras de Aidé, alzaron la voz y denunciaron el caso ante los medios, porque consideran injusto que una de ellas no merezca siquiera ser atendida en el área de Covid positivo en donde se cuenta con personal más capacitado, con médicos las 24 horas del día y enfermeras intensivistas, además de contar con los insumos que aseguren una mayor probabilidad de vida.

La jefa de enfermeras Claudia Estrada, actúa por revanchismo o simpatías, porque muy poco o casi nada ha hecho por mejorar la atención para la enfermera, cuya familia está angustiada. “Si esto hacen con nuestras compañeras, o quiero imaginar lo que hacen con los derechohabientes”, se cuestiona una de las enfermeras que está denunciando los hechos.

A ello, hay que sumarle que el personal de enfermería 0.8 de contrato, están desesperados porque no reciben el equipo de protección para evitar el contagio del Covid-19, sólo trabajan con cubrebocas, (y no es el indicado) faltando las batas de manga larga de aislamiento, y lentes, con lo cual, los exponen a riesgos potenciales de muerte por el contagio.

“Perla Villanueva, jefa de Enfermeras, del Hospital General Regional 270, le estamos exigiendo una buena atención para nuestra compañera médica y de enfermería, actualmente hospitalizada 270, atendida por personal de enfermería que está por contrato, que para variar no cuentan con protección para manejo de pacientes positivos a Covid-19”, relata el escrito enviado por enfermeras a este medio.

Las enfermeras cuestionan duramente el actuar de la jefa de enfermeras, porque no actúa a favor de ellas y revelan algo preocupante; hay trabajadores del IMSS de ese Hospital que se contagiaron en ese famoso quinto piso, pero no quieren ponerlos en cuarentena, hasta que los síntomas se agraven, como ocurrió con Aidé.

Denuncian que su jefa tiene privilegios con algunas enfermeras para que no atiendan a pacientes con Covid-19 y prefiere enviar a personal de contrato porque saben que no tienen los mismos derechos, ni el apoyo del sindicato. Todo esto, en complicidad con el Director del Hospital General Regional 270, José Timoteo Leyva Silva, quien lejos de ponerse la camiseta del IMSS, ignora los abusos de su jefa de enfermeras y, sobre todo, los riesgos que corre el personal de contrato al no contar con el equipo adecuado en caso de un verdadero código rojo.

En casa extrañan a Aidé.

En su trabajo sus compañeras rezan porque sane pronto y mientras esto ocurre, jefas de enfermeras, el Director, el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social que dirige el cuestionado Pedro Luis Ramírez y la parte patronal, el IMSS, han dejado a su suerte a una valiente enfermera que expuso su vida para atender a un paciente.

A nadie parece importarle el tema. Lo manejan como una estadística más.

La hipocresía hizo nido en el Hospital General Regional 270.

Aquí para los mandos, la vida no vale nada.

COMO LAS FOCAS, PEDRO LUIS SE APLAUDE SOLO

Un grupo de decididas enfermeras de la clínica 3 de El Mante del IMSS, tuvieron que salir de su lugar de trabajo a exponer las graves carencias que tienen para desarrollar profesionalmente sus tareas en medio de la pandemia que representa el Covid-19.

A muchas de ellas las intimidaron para que no fueran a la protesta.

La era de terror que impera en el seno del sindicato Pedro Luis Ramírez, tiene mermado cualquier brote de rebeldía, pero al grupo de valientes enfermeras poco les importó. El asunto se volvió noticia estatal y nacional, a grado tal, que de inmediato, el Director de la clínica, Adrián Vera, así como personal identificado al grupo de Pedro Luis, aparecieron en las fotografías entregando el anhelado equipo de trabajo.

¡Un verdadero milagro!

Aquí en El Mante, el IMSS también tiene a su personal privilegiado al que dejan fuera de cualquier riesgo de Covid-19 y envían a quienes no han simpatizado con la dirigencia de Pedro Luis y su esposa, Beda Leticia Gerardo.

Los “Pedro´s” quieren capitalizar políticamente todo lo que llega y hasta lo que no llega. Lo hicieron con los túneles de sanitización que hicieron trabajadores de la Comapa Mante (que para maldito caso sirven, pues no evitan contagios) y ahora, lo hacen con el equipo adecuado que reclamaban las enfermeras. Es posible que el equipo haya estado resguardado en algún lugar de la ciudad, en la casa de un fan de Pedro Luis.

Al no justificar su labor al frente del sindicato, los allegados a Pedro le hacen fiesta hasta por lo que no hace. Una verdadera hipocresía.