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AL VUELO-Armaggedon

AL VUELO-Armaggedon

Por Pegaso

        ¡Ay, de mí! ¿No se los dije? El Trompas será el sujeto que apriete el botón del fin del mundo.

        Volando por el límpido cielo primaveral de Reynosa me enteré de la orden que dio el nazi para bombardear una base aérea de Siria, cercana a una población llamada Homs.

        En la acción militar murieron nueve civiles, entre ellos, cuatro niños.

        Por lo pronto, luego del acto criminal, ya podemos colgarle el epíteto de asesino sin temor a equivocaciones.

        Poco antes y poco después que El Trompas tomara posesión de la Presidencia del país más rico del mundo, y por ende, convertirse en la persona más poderosa del orbe, señalé aquí mismo que su mano sería la que apretará el botón del juicio final, el que dará la orden ejecutiva para el inicio de la Tercera Guerra Mundial.

        ¿Exagerado? Posiblemente, pero los hechos empiezan a ocurrir, tal como lo dije en aquella ocasión.

        No soy pitoniso, vidente, hierofante, arúspice, augur u oraculero, pero pienso que a los gringos que votaron por él ya les están empezando a temblar las corvas y a sudar frío porque apenas les está cayendo el veinte acerca del tipo de monstruo ególatra que llevaron al poder.

        Rusia condenó el atentado y Corea del Norte amenaza con bombardear ciudades norteamericanas.

       Tratando de justificar lo injustificable, el Gobierno de El Trompas asegura que la acción militar fue en respuesta al ataque con armas químicas que grupos terroristas islámicos, Isis en particular, hicieron sobre la población civil de aquel país, provocando la muerte de 86 personas, entre ellos, 27 niños.

        Autonombrado como el policía del mundo, Estados Unidos no tuvo más remedio que castigar la osadía, arrojando misiles Tomahouk y matando a más civiles.

        Esto nos pone al borde de una tercera guerra mundial, o de hecho, ya estamos en la antesala de ella, como bien lo comentan algunos medios internacionales de comunicación.

        Vemos que por menos de eso se originaron las dos primeras grandes conflagraciones.

        Aprendamos algo de historia: La Primera Guerra mundial fue un conflicto que inició el 28 de julio de 1914 como un enfrentamiento localizado en el Imperio Austro-Húngaro y Serbia; se transformó en un conflicto armado a escala europea cuando la declaración de guerra austro-húngara se extendió a Rusia, el 1 de agosto de ese mismo año, y finalmente pasó a ser una guerra mundial en la que participaron 32 naciones, finalizando en 1918.

        El incidente que generó éste enfrentamiento fue el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Habsgurgo, heredero del trono austro-húngaro, cometido en Sarajevo el 28 de junio de 1914 por el nacionalista serbio Gavrilo Princip, pero eso fue la puntilla, porque desde finales del siglo anterior los afanes imperialistas de naciones como Francia, Alemania e Inglaterra ya estaban presentes.

        La Segunda Guerra Mundial se desarrolló entre 1939 y 1945, con la intervención de la mayor parte de los países del mundo, México incluido, así como las grandes potencias militares de la época polarizadas en dos grupos: Los Aliados y el Eje Berlín-Roma-Tokio.

        Nuevamente, fue un incidente internacional el que detonó el conflicto global:  El primero de septiembre de 1939, con la invasión de tropas alemanas a territorio de Polonia.

        En ambos casos Alemania fue la figura central y el enemigo a vencer.  La sangre aria en busca de supremacía.

        Cuando leo que la abuelita de El Trompas es de origen alemán, se me “encuera el chino” porque entonces vuelve a aparecer el factor ario en escena.

        Para nadie es un secreto la tendencia hitleriana del presidente gringo.

        Vemos en la red encabezados como los siguientes:  “Los principios nazis de propaganda en el Trompas”, “El Trompas: ¿Tras las huellas de Hitler?”, o bien, “El Trompas y la historia aria”.

        Es así como en algunas publicaciones se dice que El Trompas, al igual que Hitler en su momento, despliega un discurso ultranacionalista, xenófobo, racista, insultante y excluyente que lo lleva a proponer absurdos, como la construcción del muro en la frontera con México y la expulsión de todos los migrantes ilegales.

        También leo y escucho que acorazados de los Estados Unidos están tomando posiciones a escasos kilómetros de Corea del Norte, quizás en prevención de atentados terroristas en territorio norteamericano.

        Todo esto es preocupante porque un conflicto global provocará la muerte de millones de personas, impactará en los mercados internacionales, causará una crisis económica sin precedentes y disparará los niveles de contaminación ambiental, si bien nos va.

        Ojalá estén equivocados quienes dicen que El Trompas será la mano que apriete el botón del Armaggedon.

        Yo, por lo pronto, empezaré a construir mi búnker y lo llenaré con un chingo de gansitos, churrumáiz, latas de coca cola y una olla de tamales veracruzanos para poder aguantar mientras duran los cocolazos.

        Nos quedamos con el refrán estilo Pegaso: “El individuo que asesta el primer golpe, lo hace en dos ocasiones”. (El que pega primero, pega dos veces).