Columnas

AL VUELO-Pregunta

AL VUELO-Pregunta

Por Pegaso

            Recostado en mi blanca nubecilla viajera me puse a pensar sobre la pregunta que recién formuló el Presidente Enrique Peña Nieto a los mexicanos, al responder a la serie de cuestionamientos, protestas, gritos y sombrerazos por el alza de las gasolinas: «¿Qué habrían hecho ustedes?

            El gasolinazo en realidad no es la gota que derrama el vaso, ni mucho menos.  Detrás vienen más golpes brutales para la economía y el bienestar de millones de mexicanos.

            Está pendiente, por ejemplo, la eliminación de los apoyos que se otorgan a los pacientes de enfermedades crónico-degenerativas en el IMSS y está latente la amenaza de eliminar las partidas presupuestales a las escuelas públicas, entre otras ocurrencias de Papá Gobierno.

            Escuché una versión en la calle con respecto a que el Presidente no tolerará que le mienten a su mamacita en las redes sociales o en cualquier otro medio de comunicación.

            ¡Pero cómo quiere que no le recuerden el 10 de mayo si no puede con el país, si se le está desmoronando en las manos!

            Si las condiciones internacionales son «adversas e inciertas», como aseguran los genios de gabinete, debió preverse con tiempo suficiente.

            Yo, Pegaso, después de sesudas meditaciones pude dar varias posibles respuestas a la cuestión epistemológica del mandatario: «¿Qué habrían hecho ustedes?»

            He aquí el resultado.

            De estar en los zapatos Luis Vuitton del Presidente, ésto es lo que habría hecho:

-No hubiera nacido.

-Habría informado con suficiente anticipación al proletariado para que juntaran una lanita y pudieran comprar una bicicleta de medio cachete.

-Iniciaría un programa para convencer a los millones de mexicanos inconformes de que aumentar el precio de las gasolinas redunda en el mejoramiento de su salud.  Así, tendrán que caminar más y eso permitirá bajar los niveles de colesterol, triglicéridos y glucosa.

-Antes de tomar la resolución de liberar los precios, hubiera vendido la Casa Blanca para garantizar el subsidio a las gasolinas durante un año.

-Les diría a los mexicanos que gracias a su loable sacrificio los diputados, senadores, ministros de la Suprema Corte y Consejeros del INE seguirán gozando de sus bien merecidas percepciones salariales, dietas, compensaciones y gastos accesorios.

-Crearía un fondo especial para modificar los vehículos a gasolina.  Sí.  La modificación consistiría en hacer dos hoyos en el piso del auto para que los conductores puedan impulsarlo con los pies al estilo de los Picapiedra. Así se ahorrarán una buena lana al no gastar en gasolina.

-A las presiones del Fondo Monetario Internacional para que México mantenga el nivel de ingresos necesarios para seguir pagando su deuda externa, respondería levantando la mano derecha a la altura de la cara, con los dedos meñique, anular, índice y pulgar flexionados y el cordial levantado.

-A Donald Trump, que pretende que con parte del dinero proveniente del IEPS paguemos el muro, le diría que tomara con la diestra cada uno de los ladrillos de su barda y se los introduzca por el trasero.

            Tales son las acciones que yo habría realizado de ser el Presidente.

            Aquí nos quedamos con el refrán mexicano estilo Pegaso:  «En respuesta a cuestionamientos impertinentes, sistema auditivo opacado». (A pregunta necia, oídos sordos).