CALDERON, PEÑA, EGIDIO…SE OLVIDARON DE RODOLFO
CUADRANTE POLÍTICO
POR FERNANDO ACUÑA PIÑEIRO
CALDERON, PEÑA, EGIDIO…SE OLVIDARON DE RODOLFO
El magnicidio de Rodolfo Torre Cantú, ocurrió a mediados del 2010, en el último tercio de la presidencia panista, encabezada por Felipe Calderón. En el 2012, con el retorno del PRI al poder político del país, muchos creíamos que por ser de su propio partido, los integrantes del nuevo gobierno federal ordenarían una exhaustiva investigación, y presentarían a los autores intelectuales y materiales de tan condenable asesinato.
Sin embargo, no ocurrió así, y es fecha que ni panistas, ni priistas, se han preocupado por esclarecer, esta oscura mancha política, que deshonra, la civilidad y la inteligencia de la llamada ciencia de gobernar.
La propuesta de lectura y de análisis, sobre el tema de Rodolfo Torre Cantú, surge, a raíz de que fue a finales de este mes de junio, cuando ocurrieron los hechos, considerados como el punto de inflexión, que marcó la decadencia del PRI en Tamaulipas: un derrumbe sangriento que se arrastraría a lo largo de seis años, con Egidio Torre en el poder, hasta llegar a la alternancia. Siete años de impunidad, de los cuales, dos años pertenecen al PAN federal y cinco al PRI de Enrique Peña Nieto.
No sabemos si, llegada la fecha del séptimo aniversario del magnicidio, (28 de junio), el PAN tamaulipeco, como partido de la alternancia, vaya a hacer algún pronunciamiento sobre el tema. Tal vez lo haga de manera formal, aunque a decir verdad, si las bases priistas de la entidad tienen a quien reclamarle el olvido del atentado contra Rodolfo, ese sería, en primer término, a su propio hermano, quien gobernó durante seis años, sin mostrar una real preocupación por esclarecer los hechos.
Egidio se limitó a organizar pequeños homenajes cada aniversario, y su rostro rebosante de felicidad, se dejó apapachar por los reflectores, sin mayor aflicción por el hombre que le abrió a él, como su consanguíneo, las puertas del poder de palacio en Tamaulipas.
Tal vez, el mejor homenaje que Egidio pudo hacer a su hermano, hubiese sido, rescatar a los rodolfistas que se acercaron inmediatamente a el, para pedirle cobijo. Pero ETC los rechazó, diciéndoles que con èl no habían hecho ningún trato. O sea, el PRI rodolfista, el de los abrazos y la calidez recibió un tremendo portazo. Por uno de esos zaguanes del desaire y el trato hosco, empezó a colarse la idea de un cambio en Tamaulipas.
Después de Egidio, los priistas que le siguen en la pirámide de la responsabilidad son los que integran el grupo de poder, en torno a Enrique Peña Nieto. La historia los condena a ambos por igual: Egidio tiene no solo una culpa de carácter político, sino también de índole ética y moral, mientras que el gobierno de Peña Nieto, carga con el peso de la incongruencia y la deslealtad hacia uno de sus más dignos correligionarios, como lo fue el médico Rodolfo.
En este mes de junio, será el segundo del magnicidio rodolfista que, el PRI lo vivirá en la derrota política, pues en el 2016, las elecciones fueron el cinco de junio. Pero ahora, en este 2017, el crimen contra Rodolfo Torre Cantú, podría alcanzar una mayor dimensión hacia el interior del priismo, si tomamos en cuenta que, el tricolor vive tiempos aciagos, amordazado políticamente, y golpeado por la ausencia de democracia y de legalidad en su dirigencia estatal, a cargo de Aída Zulema.
En cuanto al PRI de Enrique Peña Nieto, me parece incongruente que anden persiguiendo ex gobernadores, mientras que, no han podido o no han querido, solucionar el magnicidio de alguien que estuvo a punto de convertirse en gobernador tamaulipeco.
¿Complicidad, abulia, desinterés, incapacidad? Cual de todas estas palabras explica un silencio que, en dos semanas más cumplirá siete años?
CABEZA, SIN IMPORTAR COLORES
Durante los eventos del cumpleaños 400 del pueblo de Tula, el Gobernador García Cabeza de Vaca dijo que los presidentes municipales de Tamaulipas, son sus aliados, sin importar los colores, pues a todos ellos los une el interés de generar beneficios para Tamaulipas.
“Ha llegado el momento de sumar a Tamaulipas”, dijo el Gobernador, y agregó: “A todos los tamaulipecos nos une el bien común y el trabajo por sus habitantes, para recuperar la paz”.
ALMARAZ SIGUE ENTREGANDO CALLES CON CONCRETO HIDRAULICO
En esa ocasión le tocó a la colonia Corregidora, según lo acaba de anunciar el alcalde Oscar Almaraz, dicho núcleo poblacional, integrado por familias de la clase trabajadora, contarán con calles pavimentadas con concreto hidráulico, a lo largo de nueve cuadras, lo cual, seguramente, le cambiará el rostro a dicho sector de la urbe capitalina. A propósito del ayuntamiento, a los que hemos visto muy atareados, son a las brigadas de bacheo, en la colonia “Adolfo López Mateos”.