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Caminante no hay caminó, se hace camino al andar.

Por la libre

Caminante no hay caminó, se hace camino al andar.

Por Edelmira Cerecedo García.

«Ay mucha gente que necesita ayuda, el fin de semana fui a la Temporalera, y estaban unos señores que ocupaban bastones y una sillas de ruedas, ya se las lleve, pero existe mucha gente por ayudar» en aquel entonces me lo platicaba en una entrevista cerca cara a cara en su oficina del Distrito de Riego Mateo Vázquez Ontiveros, el mismo que hablaba de la transformación propia que estaba pasando, pues se veía pacífico y hablaba de ayudar, de esperanza y de la forma en que él estaba seguro podía ayudar para que la gente recobrará creer en los que llegan al poder.

Me despedí de él, le agradecí la entrevista y siempre tuvo detalle con la gente de los medios, siempre ha sido reservado pero nunca negó una entrevista, así recuerdo a quien hoy lo veo en una de sus facetas que ha aprovechado para resolver, para aportar, para ayudar, para cambiar.

Alumbrado, sí, hoy en día la respuesta para sacar a la Ciudad de lugares importantes de las penumbras ha sido parte del cambio, y un granito de arena para contribuir a la seguridad.

Las colonias están más alumbradas, los bulevares, los parques como el Zaragoza, que es punto de reunión de muchas familias completas, hoy se siente más tranquilo el poder transitar con una buena visualización.

La reparación en calles, los accesos de discapacitados, el espacio para estacionar las motos y poder permitir así que los vehículos tengan más oportunidad de encontrar estacionamiento, el apoyo en la infraestructura educativa, que atinadamente instruye para que sean atendidas.

No olvidemos el apoyo al deporte, ha sido constante, el apoyó al turismo, y su incansable lucha por no dejar de apoyar las campañas oportunas de salud.

Así ha sido el caminar de la administración de Mateo Vázquez, con todos los apuntes de quienes han querido estar para despuntar, cuando antes que nada lo más importante es servir, es estar al pié de las necesidades, aquellas que el mismo vislumbraba desde aquel lugar que era el Distrito de Riego, y que siempre sumo, hasta que se llegó la hora de poder asumir el timón.

Para Mateo no ha sido fácil su administración, entró con un desafío enorme en el ámbito federal, con todas los contra, y aún así no ha dejado de hacer, de darle la cara a una de las partes más afectadas cómo es el campo, y es que es su esencia, sabe lo que conlleva vivir de ello, trabajarlo, por eso sabe dónde pega cuando las cosas se deciden en un lugar dónde no tienen idea lo que es vivir entré productos de materia prima que son granos y caña, pero en el nivel federal solo mueven el lápiz y con una facilidad quitan y ponen ceros.

La buena noticia de Mateo ha sido su mancuerna con el gobierno estatal, eso ha sido fundamental para poder seguir adelante gestionando por las cosas que más requiere el municipio.

No es fácil trabajar en medio de quiénes a sazón pretende formar su propio círculo, aún viendo que está administración debe de ser para conjuntar y fortalecerse, entender que no se trata de operar, sino de servir, que sólo existe un capitán, que no pueden buscar o pretender ganar tiempo a un interés propio y que para ello es necesario cómo el fue en su momento, lejos de los puestos gubernamentales, y eso es algo que debe de reconocerse siempre, el trabajo de verdad afuera, con dinero de fuera, eso es lo que cualquiera que aspirará debe de hacer, por que desde adentro, todos pueden creerse, sentirse y pensarse ser un posible sucesor, entonces no tiene mérito propio, cómo aquel que un día en una oficina lejana de gobiernos platicara con pasión la intención de hacer algo por su ciudad y llevarlo a cabo con convicción tal cómo fue el caso en su momento de Mateo, hoy por ello es el Presidente, demostrado está por el que no existe caminó, el caminó se hace al andar.