Tribuna

Chamaqueados

Por Javier Terrazas

El miércoles 29 de marzo, Día de San Eustasio, según  el calendario, bien podría calificarse en Tamaulipas como el “Día del Chamaqueado”.

Ese día, hubo una sesión histórica en el Congreso del Estado, en la que pareciera que hubo una tomadura de cabelleras en el mundillo político.

Le comento más o menos como se desarrollaron los hechos para que usted, arme su conclusión.

Resulta que el titular del Poder Ejecutivo Estatal, — o sea el gobernador – envió una iniciativa de reformas al Código Penal, relativas a sancionar el  halconeo y espionaje a las fuerzas armadas.

Ese fue el argumento que en la Junta de Coordinación Política del Congreso de usó para el cabildeo de la iniciativa a fin de que éste tema se seguridad, para el que hay consensos, se diera una dispensa de trámite a comisiones y entró directo al Pleno, aprobado por unanimidad.

Y es que unos días antes, se había firmado un Acuerdo de Coordinación Tamaulipas en donde todas las fracciones firmaron  — PAN, PRI, PANAL, PMC, PVEM y MORENA – de tal forma que era el estreno.

Así es que a iniciativa de la fracción del PAN que comanda el propio Carlos García González, a la vez Presidente de la Junta de Coordinación Política, por la “vía libre y olímpicamente” pasó la iniciativa.

Sin embargo, como la información se hace pública de inmediato, periodistas que cubre la fuente parlamentaria, así como abogados y la sociedad del internet, empezó a hurgar en el documento.

Y en solo unos días, se hizo una bola de nieve, pues además de los citas objetivos de ir contra el halconeo y espionaje a fuerzas armadas, se hicieron otros enredos involucrado a los medios, el interne, y redes sociales, así como a sus operarios, es decir periodistas y sociedad en general.

El malestar fue creciente, de tal forma que desde algún lugar en el medio oriente,  alguien orientó y alertó al titular del ejecutivo sobre la situación y el impacto, de tal forma que al estilo Trump, vía twitter, se retractó.

Y ofreció no promulgar dicha ley y enviar al Congreso las observaciones para su adecuación, diciéndose respetuoso del ejercicio periodístico y la libertad de expresión.

Cuál fue el objetivo real de ésta reforma madrugadora, que si bien es cierto deja muy mal parados a los 36 diputados locales,  no sorprendió a la sociedad, que está más a la expectativa y defensiva.

¿Quién chamaqueó a quién”?, desde el origen del documento. La iniciativa pasa por un proceso y no es solo un escritorio. Son varias personas, varios tamices.

Y por todos pasó sin que la tocara con el pétalo de una rosa.

¿O sería que estuvo fabricada con premeditación, alevosía y ventaja?,  pero hubo un mal cálculo, no se contaba con que “las redes y medios pudieran enredarlo”.

Lo que sí es obvio,  es que hubo muchos “chamaqueados”.

Y ya con el resultado final, algunos chamuscados.

Por lo pronto, ayer se apersonaron con la representación del Ejecutivo en el Congreso Local, Abelardo Perales y Gloria Garza, Consejero Jurídico y Subsecretaria de Asuntos Jurídicos, a dar la cara y entregar los ajustes, aunque sin precisar cuáles.

Es solo una oportunidad de hacer observaciones, aunque sea a sí mismo. Pero los Diputados, en particular de las fracciones de oposición, a revisar con lupa, en especial los priistas, en busca de salvar un poco la honra.

Por cierto, después de ésta salida en falso, ayer el Coordinador Alejandro Etienne, se reunió con la dirigente estatal del PRI, Aída Zulema Flores Peña, para trabajar juntos la postura.

Mucho puede orientar la reynosense,  pues en la pasada legislatura presidió la Comisión de Justicia y fue una de las más activas y fiscalizadoras del trabajo parlamentario..