EL FUTURO DEL GOBERNADOR
Victoria y Anexas
Ambrocio López Gutiérrez
EL FUTURO DEL GOBERNADOR
Francisco García Cabeza de Vaca, aun gobernador de Tamaulipas, ha sido mencionado como aspirante del Partido Acción Nacional a la presidencia de la república y esa posibilidad llenó de felicidad a los miembros de su equipo pues la versión cobra verosimilitud considerando que el reynosense encabeza todavía a un pequeño grupo de gobernadores conservadores que se han caracterizado, unos más que otros, a ponerle obstáculos al presidente Andrés Manuel López Obrador quien, hasta ahora, ha sido paciente ante los desplantes de algunos mandatarios que han anunciado la posibilidad de romper el pacto federal, además, se exhiben con frecuencia con funcionarios de los Estados Unidos.
No dudo de la capacidad y merecimientos del tamaulipeco para ser candidato de la derecha al ejecutivo federal, sin embargo, en los días recientes han surgido noticias sobre ejecuciones sumarias en la frontera, compra de predios agrícolas en la región de la costa, monopolios de algunos productos que consume el gobierno estatal, además del nepotismo que representan la senaduría del hermano Ismael, el cargo universitario del primo Víctor Hugo Guerra García la diputación de la prima Pilar Gómez Leal (por mencionar algunos), la inseguridad creciente en la mayoría de los municipios, la indolencia que muestra el gabinete apenas a la mitad del sexenio y la inexplicable relación de la diputada panista Nohemí Estrella con un grupo de autodefensas que opera en los municipios de Hidalgo, Mainero y Villagrán.
En ese contexto, algunos columnistas de la capital de la república entre los que destacan Raymundo Riva Palacio (El Financiero) y Salvador García Soto (El Universal) se han encargado de desgranar los nombres de funcionarios del gobierno de Tamaulipas que antes sirvieron en la administración anterior (panista) de Puebla y del gobierno federal en tiempos de Felipe Calderón Hinojosa, últimamente más conocido como el subcomandante “Borolas” y, por si fuera poco, acaban de dar a conocer datos en el sentido de que la metodología y la paternidad de la estafa maestra vienen desde los gobiernos federales albiazules.
Mientras crece la versión de que la fiscalía general de la república engorda el expediente de FGCV, en diferentes oficinas de Ciudad Victoria se dijo que funcionarios protegidos por el secretario general de gobierno, César Verástegui Ostos, no fueron a sus respectivas oficinas pues, se dice, andan asustados porque han cometido muchas tropelías y temen ser involucrados en las irregularidades.
Vale mencionar que FGCV no sería el primer gobernador tamaulipeco en intentar que su partido le postule para la presidencia de la república ya que en el pasado, el matamorense Jesús Yarrington Ruvalcaba, hizo precampaña nacional con resultados desastrosos ya que llamó mucho la atención, fue investigado y, después de un breve exilio en Italia fue aprehendido y llevado a los Estados Unidos donde se le retiene por múltiples delitos lo cual demuestra que ser de la frontera, tener amigos gringos y hablar inglés, no representa ninguna garantía.
Se decía que Yarrington Ruvalcaba era amigo de George Bush JR, antes de que fuera presidente de los EU pues la leyenda urbana reseña que el personaje texano se corría francachelas en Matamoros, donde Tomás era presidente municipal y le ponía patrullas para su protección lo que le valió que en una reunión fronteriza posterior calificara al exalcalde matamorense como la nueva estrella de la política mexicana pero, en la actualidad, el texano goza de feliz retiro mientras el exgobernador tamaulipeco espera sentencia en una cárcel y dudo mucho que sus viejos amigos gringos o sus miles de seguidores en Tamaulipas traten de visitarlo o, cuando menos, enviarle un mensaje de aliento.
Antes de cerrar el tema, vale reconocer que el gobierno de FGCV tuvo un idilio de casi dos años con los tamaulipecos quienes le dieron el beneficio de la duda esperando resultados, pero la conducta de Ismael, Arturo Soto, Xicoténcatl González, César Verástegui y otros próceres del sexenio, acabaron con las esperanzas de quienes se ilusionaron y basta echarle un vistazo a las redes sociales para notar que el saldo es desfavorable para el PAN.
Era tanta la fuerza del gobernador que se dio el lujo de “castigar” a decenas de comunicadores, contribuyó a la desaparición de varios periódicos y se atrincheró en las redes sociales sin contar en que estas son muy volubles y ahora carece de apoyo suficiente tanto en impresos como en las páginas virtuales al igual que los miembros de su gabinete quienes han desperdiciado la mitad del sexenio creyendo cándidamente que su jefe era la nueva estrella de la política mexicana.
El poder del gobernador le permitió una buena cuota en la administración de la Universidad Autónoma de Tamaulipas donde estacan el secretario de Administración Víctor Hugo Guerra García, el secretario Técnico Carlos de Alejandro Acevedo, el secretario de Extensión, José Ulises Arredondo Llanos y el coordinador de Comunicación, Omar Benito de la Fuente quienes poco acuden a sus oficinas ya que atienden preferentemente las tareas de la “superioridad”.
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