Columnas

Estrategia de Durazo sin mancha.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

Estrategia de Durazo sin mancha.

La lección que se llevaron los operarios de la estrategia de seguridad del gobierno de Don Andrés López Obrador, fue mayúscula.

A ello se debe que ahora, salgan, en voz de secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño a dejar en claro que ese quebranto no cambia las coas, porque seguirán con el plan trazado desde el inicio del sexenio.

Aunque, debe agregarse la noticia más reciente en materia de seguridad, que ya no hay guerra contra el narcotráfico, porque el Gobierno quiere la paz, deseo también exteriorizado por los ciudadanos mexicanos desde hace muchos años.

Desde luego, falta ver que opina la contraparte que respondía la guerra y que, desde una situación más cómoda, por eso de la impunidad con la que se mueven y sin importar a quién dañen y como lo hagan.

Desde la parte ciudadana, quizá sea un asunto que se mantenga sobre la mesa y en los comentarios de todo los días, dado que, son quienes sufren las consecuencias de las acciones de la delincuencia, en especial, porque nadie está de acuerdo en que, delitos, agresiones y homicidios se queden sin resolver.

Es sencillo decir que se quiere la paz y que ya no hay guerra contra el narcotráfico, cuándo millones de personas se sienten vejados y quisieran exigir los derechos constitucionales consagrados en las Leyes mexicanas, pero, se quedan con las ganas, porque además de el alto costo monetario que tienen que pagar, se agrega el psicológico y el familiar, en virtud de que, hay miles que perdieron a seres queridos y que no les abriga esperanza alguna de encontrarlos ya sea vivos o muertos, pero encontrarlos.

El movimiento a favor de los 43 estudiantes que desaparecieron y que tiene la atención de las autoridades federales, es nada, frente a los miles y miles que tampoco están ya y por los cuales no puede decirse de forma simple que se acabó la guerra contra la delincuencia.

Muchos esperan que desactivar la guerra del día a día, quiera decir que cambiarán las formas, es decir, privilegiar el uso de la inteligencia policial para dar golpes certeros, sin necesidad de que la gente de bien quede en medio de los conflictos entre delincuentes y autoridades.

Los otros.

Una vez constituidas las Comisiones Ordinarias del Congreso del Estado, producto los acuerdos entre las fracciones parlamentarias, el llamado del presidente de la Junta de Coordinación Política, Diputado Gerardo Peña Flores, fue en el sentido de trabajar con sensibilidad social y madurez política, porque se trata responder al compromiso que tienen con la ciudadanía que les eligió para ocupar una curul.

Les dijo además que las campañas proselitistas quedaron muy atrás y que cada Diputado deberá pensar en legislar, fiscalizar y gestionar a favor de las familias y los sectores productivos de la entidad.

En el salón de Sesiones del Congreso del Estado, hubo comentarios en el sentido de que, la designación de responsables en las Comisiones Legislativas entrañó mucho diálogo y comprensión, aunque el ingrediente principal fue la intencionalidad de cada Diputado para colaborar de la forma más amplia en cada tarea legislativa que les toque.

Al parecer, ninguno de los miembros de la Legislatura se sintió relegado, marginado o, dicho de otra forma, que le hayan hecho mala cara, en virtud de que, aquello privilegiaron para la distribución de las comisiones fue el compañerismo, puesto que, estarán tres años juntos y es mejor una buena relación con diálogo de por medio que broncas por discrepancias personales sin sentido.

Era lógico que el Director de Tránsito de esta capital, tenía que irse, por ello presentó su renuncia al alcalde Xicoténcatl González Uresti, quien de inmediato designó en su logar a César Alberto Puente Torres quien fungía como coordinador operativo.

El que se fue, pero, no envuelto en suspiros sino en pesares, porque deberá de enfrentar la justicia, es Jesús Rafael Mouret López, de quien todo mundo suponía que era un caballero y que, su gestión podría mejorar el funcionamiento de la corporación, algo que no se ve con efectividad desde aquellos tiempos en los cuales, don Oscar Torres Delgado, estaba al frente de la entonces Delegación y, más que menos, se respetaba el Reglamento de Vialidad de la ciudad.

Esto de tránsito, pero, al relacionarlo con la circulación vehicular implica a razonar sobre las propuestas ciudadanas en el sentido de que, es ya urgente que el Cabildo de Victoria apruebe la contratación de expertos en ingeniería vial, para que lleven a cabo un estudio a fondo sobre los puntos conflictivos que tiene la ciudad ya sea por el intenso tránsito de vehículos durante muchos momentos a lo largo del día o bien, que debido a las características de las avenidas, obliga a la colocación de semáforos, para evitar personas lesionadas por choques o pérdidas materiales por millones de pesos.

Entre esos puntos críticos están la interjección entre el Bulevar Luis Echeverría con la calle que baja de la Loma, por el rumbo del Centro Universitario, ya que, solo hay un semáforo para el control de los vehículos, unos metros antes del vado del Colegio Antonio Repiso, mientras que, en plena subida, quienes llegan por el Bulevar en dirección de la Universidad deben de jugársela como si se tratara de un paso de la muerte, de lo contrario nadie les dará oportunidad de pasar.

La colocación de una gran muralla alrededor del edificio de la Fiscalía General de Justicia de la entidad, que según información de los trabajadores será de más de tres metros, se ha convertido en un cuello de botella a las horas pico y jamás, se ha comisionado a un agente de tránsito para que apoye en la circulación, porque allí existe la costumbre de que los que empleados de la Fiscalía o quienes tienen asuntos ahí, se estacionan casi encima ya en la calle, porque en el espacio que había antes están los materiales que se usan para el amurallamiento del edificio y eso genera grandes riesgos.

El estudio de ingeniería vial tiene que considerar la entrada a los nuevos fraccionamientos que hay en la ciudad, porque al transitar por los Libramientos, para entrar a esos sitios de vivienda, los automovilistas se lanzan a la brava, sin importar quién va detrás de ellos y a qué velocidad viajan, de manera imprudente dan la vuelta y nadie les quita nunca la intensión de hacerlo, aún con el riesgo que corren de ser embestidos por vehículos ligeros y pesados.

Un estudio de ingeniería vial para Ciudad Victoria, evitará infinidad de accidentes en todos los sectores de la capital, de manera que el Cabildo, es decir, Regidores y Síndicos podría entregar un buen trabajo a los ciudadanos.