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LA CARTA QUE KAFKA ESCRIBIO

LETRA PÚBLICA

                                               LA CARTA QUE KAFKA ESCRIBIO

                                                                                  RODOLFO SALAZAR GONZALEZ

Franz Kafka es en forma indiscutible el escritor más importantes del siglo XX; más de un célebre escritor ganador del premio nobel de literatura como Gabriel García Márquez reconocen en la obra de Kafka la señal que los condujo al mundo de la literatura universal. Este escritor Checoslovaco, nacido en Praga, (que según Jesús Reyes Heroles es la ciudad más bonita del mundo) nació el tres de julio de 1883. Al morir tenia cuarenta y un años, logró recibirse de abogado en la universidad Checa de aquella época. Era hijo de Herman Kafka un comerciante exitoso que nunca entendió la tarea que su hijo Franz tenía que cumplir en su paso por la vida. Jamás tomó en serio al extraordinario escritor, afectando con esto el fuero interno del autor de Metamorfosis, el Proceso y la colonia penitenciaria.

Franz Kafka murió tuberculoso en un hospital de Praga, allí lo encontró la dama de la muerte, allí en Praga, la capital Checa, la ciudad de los palacios y las torres góticas lo enterraron. Kafka escribió una carta que nunca le envió a su padre y que paradójicamente a pesar de no haber llegado a su destinatario a sido leída por millones de personas en el mundo. Este documento epistolar sirve incluso de materia de estudio en las universidades donde los estudiantes asisten interesados en perfeccionar su conocimiento sobre  la literatura universal.

En este misiva Kafka reclama a su padre por medio de reproches propios de un adolescente la falta de cariño, de comprensión y de apoyo espiritual que nunca sintió de su progenitor; era un documento revelador y alzado sobre las difíciles relaciones que se pueden sobrellevar con un padre autoritario y lejano en el afecto y el cariño para su hijo. La carta es también una deslumbrante exposición de una lista de quejas desde que Kafka era un niño. ¿Qué niño no le reprocha a los mayores cuando no le ayudan a encontrar su mundo? un reproche es también un reclamo justiciero a una retribución que nunca llego; esta retribución pudo haber sido en forma de un abrazo, de un beso sincero o de una cariñosa palmada que le despeinara el cabello al hijo deseoso de protección paterna.

En el mundo de la literatura y de los intelectuales no se ha encontrado la causa o motivo  de la razón por la que Kafka no entregó su carta a Herman Kafka, su padre. Solo se sabe que los Kafka formaban parte de una vieja familia judía, larga y dilatada que siguiendo su destino viajo por todo el mundo, verbigracia la carta que a circulado a través de los años ya casi 100 por todo el mundo y por varias generaciones. Hermanos del padre de Franz Kafka llegaron a Panamá y trabajaron en la construcción del canal símbolo de ese país, otros parientes del escritor partieron rumbo a España y se desenvolvieron en el negocio de los ferrocarriles. Otros se adentraron por años en el Congo Belga en África y participaron en la apertura de vias y trenes que cambiarían el curso de la economía africana, para bien en algunos casos y para mal en otros.

Lo extraordinario de la obra de Kafka se encuentra resumida en su obra más pequeña y por eso quizá más leída, la Metamorfosis. En esta obra Kafka amanece en su cuarto convertido en un escarabajo, sus manos ya no le sirven para agarrar los objetos, sus piernas no le permiten caminar ni ponerse de pie, se arrastra como un miserable insecto que al ser descubierto por sus hermanos y su padre le prohíben que salga de su recamara para que no los avergüence con sus amistades. Allí en ese drama de la soledad y la incomprensión, está resumida toda la fatalidad que Franz Kafka percibió mientras vivió. Su final fue terrible, una hermana fastidiada de su aspecto le arrojó una manzana que se le encajo en la espalda y que finalmente le quitó la vida.

Millones de personas han escuchado la expresión: «Estamos viviendo una situación Kafkiana» o bien decimos, «Esto es para Kafka» con estas expresiones queremos darle nombre a lo absurdo de algunos fenómenos sociales y económicos que se presentan en nuestra existencia diaria.

Es sin duda un fenómeno unidimensional todo el universo Kafkiano, la carta sobrecogedora que escribió donde le cobra facturas pendientes a su padre es quizá el documento más leído por la humanidad sin que haya llegado el cartero al domicilio del destinatario. Es un reflejo del abismo que se da entre padres e hijos. ¿Cuantas cartas como las de Franz Kafka no tuvieron nunca un cartero?

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