Columnas

La coyota

David Ed Castellanos Terán

@dect1608

La coyota

El escenario mediático destacado precisamente en el marco del histórico inicio de la Cuarta Transformación, eclipsó al sector obrero e industrial de México. Las acusaciones y reclamos le llovieron directamente al Senador Napoleón Gómez Urrutia, provocando que pocos fijaran su atención en la abogada socialista Susana Prieto Terraza, quien siempre estuvo detrás de las inéditas huelgas registradas en la frontera de Tamaulipas.

Paros laborales o huelgas similares se han suscitado en otros puntos de la frontera de México con Estados Unidos, específicamente en Ciudad Juárez, Chihuahua; donde pululan los “coyotes”, me refiero a los abogados encargados de avivar a los trabajadores para que hagan estallar movimientos laborales sindicales, sobre todo con la finalidad de ejercer una presión mediática obligando a las plantas, maquiladoras y compañías a despedir y pagar indemnizaciones para los rijosos, montos económicos de los que precisamente los abogados laboristas obtendrán un jugosísimo porcentaje como pago de sus honorarios.

Precisamente de aquellos lares, venía Susana Prieto Terrazas, la abogada a la que una de las primeras mujeres de México en llegar a las cúpulas empresariales describió como: “deshonesta y sinvergüenza”, ya más no le pudo decir porque le tuvieron que retirar las grabadoras y micrófonos a quien a principios de los 2 mil, llevó el rumbo de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), me refiero claro, a Yeidckol Polevnsky Gurwitz, quien le sabe perfectamente, y le sabe bien; además tiene más que claro cómo llevar y sostener la armonía obrero patronal, pues ya lo hizo como dirigente de la Canacintra, donde en su momento había registrados más de 35 mil industriales de toda la República Mexicana.

Yeidckol, por ahora anda en rollos más partidistas (de esos no queremos ni hablar), pero nadie puede atreverse en decir que ella no es una voz autorizada para hablar del ámbito sindical, y por eso sin empacho, sostiene que Susana Prieto Terrazas, es deshonesta, y una sinvergüenza; tachándola además de ser una mujer que le ha generado mucho daño a las trabajadoras y trabajadores en las maquiladoras de México; tal parece que Yeidckol conoce perfectamente a Prieto, pues habló en una entrevista realizada en Tamaulipas sobre el proceder de Susy, quien desde siempre se ha dedicado a pedirle a los trabajadores que no entren a sus centros de trabajo; que cierren el paso a sus compañeros para que nadie ingrese a cumplir con sus obligaciones interrumpiendo el proceso de producción con la finalidad de retrasar los compromisos de las empresas y que no se puedan entregar los proyectos en tiempo y forma; ya obtenido esto en el cronograma típico de los “coyotes”, el siguiente paso es ofrecer sus servicios como abogada  para que la contraten y así cobrar cientos de miles de dólares, pues según Polevnsky, a Susana únicamente le interesa el dinero verde y llevarse las maquiladoras a Estados Unidos, asegurando que allá vive y trabaja para los americanos, no para los mexicanos.

Yeidckol Polevnsky, no negó la importancia de hacer un trabajo conjunto: maquiladoras, 4T y los gobiernos locales, en este caso, el Gobierno de Tamaulipas, pero dijo debe ser un trabajo honesto, serio, comprometido en la defensa de los intereses de los trabajadores, en donde se pueda tener tanto el nivel como autoridad de platicar y hablar con los organismos empresariales y la empresas para resolver todos los problemas; si hay que integrar un nuevo sindicato que así sea, no le dio miedo en aceptarlo a Polevnsky Gurwitz, sin embargo, terminó de rematar a Susana Prieto Terrazas,  a quien insisto, no le lanzó más calificativos porque le quitaron de enfrente las grabadoras, micrófonos y transmisiones en vivo, pero aseveró; “Esa señora no tiene nada que ver ni con el gobierno, ni con Morena, ni con Napoleón. Napoleón es exactamente lo contrario… esta señora es una sinvergüenza que además no vive en México, vive en Estados Unidos y todo lo hace para ahuyentar las inversiones en México, para que se regresen a Estados Unidos”

¡Zaaa-aas!..  se tenía que decir y se dijo.

davidcastellanost@hotmail.com