Columnas

La oposición

Tribuna

Por Javier Terrazas

La oposición

De cara a las elecciones del 1 de julio del 2018, cuando los tamaulipecos acudiremos a las urnas para elegir 43 presidentes municipales, los partidos políticos de oposición en Tamaulipas se ven apagados.

Hay una nueva realidad política desde el pasado 1 de octubre de 2016, en que el PAN es gobierno a nivel estatal, tiene mayoría en el Congreso Local y gobierna 24 Ayuntamientos.

Mientras que el PAN tiene la gran oportunidad de crecer para conquistar otros municipios;  el PRI enfrenta el gran dilema de cómo y con quienes defender sus 16 alcaldías y buscar recuperar otros territorios.

Por ahora, aparece como el único partido de oposición preocupado y ocupado en ir renovando sus estructuras municipales y sectoriales, así como analizando los nombres de sus posibles candidatas y candidatos.

Otro partido que seguramente crecerá en Tamaulipas como oposición es MORENA, pero por ahora se encuentra adormilado en manos de un veterano profesor jubilado de Reynosa, que espera le llegue por arte de magia una candidatura a senador.

No se ve una estructura estatal sólida ni siquiera en las grandes urbes del voto como Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo, Tampico, Madero, Altamira o Victoria.

El PRD, luego de su desaparición del escenario electoral por la dolorosa derrota del año pasado, no se ha podido levantar de la lona y su dirigente Alberto Sánchez Neri, no ganaría ni una regiduría en Madero.

Mientras que en el PANAL, después del encumbramiento de Carlos Cisneros Ruiz, nada se ha sabido de su trabajo a nivel estatal o municipal, atenido a que las líneas se dictan desde el SNTE y que de ahí saldrá la cantera de candidatos.

Del PVEM, bajo el mando de Patricio King López, están más ocupados en pelearse el membrete que en abrirse a la sociedad y a buscar nueva y verdadera militancia.

En tanto que en el PT, su traición al PRI y el concubinato que trae con MORENA, le está costando caro, pues están sacándole todos los trapitos y trapotes al sol, de tal forma que la ocupación de Alejandro Ceniceros es en hacerle a la víctima.

Tampoco parece verse el interés de hace casi dos años en las candidaturas independientes, como alternativa para que de ahí puedan surgir buenas y buenos candidatos con posibilidades de triunfos.

De los dos que llegaron a las alcaldías en el 2016, solo Héctor de la Torre ha dado resultados medianamente aceptables en Llera; en tanto que José Luis Gallardo Flores, de Jaumave, fue un fiasco, al grado de que no votaría ni su familia por él en otra contienda.

En un escenario complicado para la oposición en Tamaulipas, quizá los partidos que tienen algunas alcaldías como el PRI  (16)  y el PES (1), deben valorar la posibilidad de reelección de sus alcaldes.

De los 16 priistas, al menos no hay ninguna queja mayúscula de sus municipios, que pudiera dificultar su postulación, pues están en la mejor trinchera para dar la batalla en las urnas.

Así es que aunque no sean todavía los tiempos, hay que tomar en cuenta los nombres de Edelmira García Delgado, Camargo ; Juan Diego Guajardo Anzaldúa, Río Bravo; Daniel Torres Espinosa, Valle Hermoso;  Jesús de la Garza Díaz del Guante, Matamros.

Asimismo, Guadalupe Aguirre de León, Cruillas; Verónica Benavides Castellanos, San Nicolás; Yésika Selvera Garza, Abasolo; Mónica Saldívar Quintanilla, Jiménez;  Oscar Almaraz Smer, Victoria; Genoveva Córdoba Castro, Palmillas.

Y de la misma forma Marisela Rodríguez González, Bustamante; María Guadalupe Rodríguez Gámez, Miquihuana; Pedro Muñiz Camacho, Ocampo; José Antonio Rivera Espinosa, Nuevo Morelos; Faisal Smer Silva, Aldama;  Magdalena Peraza Guerra, Tampico.

En tanto que por el Partido Encuentro Social,  Jorge Navarro Garza, Díaz Ordaz.