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La tradición no debe morir.

Conceptos

La tradición no debe morir.

Por Edelmira Cerecedo García.

La fiesta de Día de Muertos se realiza el 31 de octubre y el 1 y 2 de noviembre, días señalados por la Iglesia católica para celebrar la memoria de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos. Desde luego, la esencia más pura de estas fiestas se observa en las comunidades indígenas y rurales, donde se tiene la creencia de que las ánimas de los difuntos regresan esas noches para disfrutar los platillos y flores que sus parientes les ofrecen.

Y en efecto, esa tradición tan nuestra, tan mexicana no debe de morir, como tampoco debe de dejarse de fomentarla, y es por eso que hoy tras la sesión de cabildo que se realizara a puerta cerrada para entregar las comisiones a los regidores e incluso sumar el apoyo de los síndicos, se otorgó la comisión de turismo y fomento a la industria a la primera Regidora Sheyla Frida Palacios Juárez junto a ella está la primer Sindico Elba Mariana Torres Madrigal y el décimo sexto regidor Christian Alejandro Medina Villasana.

El honor a quien honor merece, y es justamente a Sheyla Frida Palacios  a quien sin lugar a duda tras la experiencia ya vivida en la administración pasada como comisionada en el terreno de Turismo a quien se le reconoce una agenda precisa de la actividades a llevar sobre los diversos temas que se pueden desarrollar para atraer a la sociedad a ser parte de los movimientos de la economía en el área turística.

Por ello la apertura de realizar eventos que tengan continuidad y hacerlos tradición es parte importante de lo que destaca la Regidora que por su trabajo a realizar hoy se puede decir es la embajadora del turismo en Mante, poniendo nuevamente a las escuelas, instituciones, organizaciones y todo aquel que quiera participar en la realización de los altares de muertos, y el gran desfile para concurso de catrinas.

La historia, la tradición, la pureza  del México de todos los tiempos dan vida al día de muertos, sacando a la sociedad Mantense a la distracción de una tarde de fiesta, con olor a cultura, con sabor a talentos, con esencia a competencia pero sobre todo con el deseo de generar a El Mante un evento que se haga tradición, que pueda tener el esmero y el empeño de todos para generar entrada de turistas de otro lugar que quieran venir a ver que en este municipio se tiene grandeza en la recreación, y que cada altar es una obra de arte, que cada catrina es una muestra artística.