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Los desplazados

Tribuna

Por Javier Terrazas

Los desplazados

En todas las campañas políticas, en las charlas familiares o de amigos, el tema que aflora es la preocupación por la creciente inseguridad.

Es también uno de los puntos de exigencia que salen en las encuestas que miden la problemática social de las regiones de nuestro estado.

La razón es que la ola criminal no para, siendo las ciudades tamaulipecas más golpeadas Reynosa, Victoria, Mante y San Fernando.

Los episodios cotidianos de violencia no solo dejan estela de muerte, orfandad, dolor, duelo y desamparo económico.

Muchas familias no tienen otra alternativa que buscar  otras alternativas de residencia y espacios laborales, aunque para ello dejen casa, escuelas y amigos.

Se trata de un fenómeno identificado como los desplazados de la violencia e inseguridad.

En la nueva realidad mexicana, la movilidad social producto de los efectos de la delincuencia organizada es intensa.

Los cambios de residencia a sitios que ofrecen mejores condiciones de seguridad para las familias es cada vez más socorrida.

Ciudades como Mérida, Querétaro, Aguascalientes, San Pedro Garza García (Nuevo León)  o Saltillo, están creciendo en forma significativa, por el flujo de habitantes de zonas en conflicto.

Sin embargo, no todos los ciudadanos afectados por éste fenómeno están en condiciones de emigrar.

La gran mayoría se queda y sigue sufriendo el problema y la zozobra permanente del problema.

Los focos rojos se encendieron en El Mante hace unos días cuando la empresa lechera Lala optó por retirar punto de distribución, sus vehículos y personal.

Tamaulipas no puede ni debe entrar en ese círculo nocivo que genera la violencia generalizada que apanica a todos.

A empresarios, a obreros, a servidores públicos e incluso a los propios policías.

Por ello, fue buena la presencia en la capital tamaulipeca el pasado martes del Comisionado General de la Policía Federal, Manelich Castilla Craviotto, quien se reunió con el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.

Con ellos estuvieron los mandos de las Fuerzas Federales y autoridades estatales de seguridad y procuración de justicia.

Uno de los puntos de acuerdo fue refrendar el compromiso de fortalecer acciones y estrategias que ayuden a garantizar la paz y bienestar de las familias.

Permiten éstos encuentros estrechar la coordinación de las instituciones del Gobierno Federal y el Gobierno del Estado en ese objetivo común.

Revisar las estrategias trazadas y diseñar otras adicionales, ampliar el trabajo de inteligencia para afinar las acciones de la Federación y Estado,  tendientes a mejorar resultados.

El compromiso de Manelich Castilla Craviotto, Comisionado General de la Policía Federal, fue darle en el esquema de seguridad más relevancia a Tamaulipas como un estado importante para México.

«Acciones de precisión, mayor comunicación y coordinación que nos va a permitir dar mejores resultados”, sintetizó el funcionario federal.

Tiempo de resultados buenos para las familias tamaulipecas. Más allá de partidos, niveles de gobierno e intereses político electorales.

La cuota de sangre de mayo, fue mayúscula en la entidad.