Columnas

Los Huracanes 2020

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

Los Huracanes 2020

Los huracanes ocurren como resultado de los sistemas de tormentas con proporciones masivas que se forman sobre el agua del mar y entran a la tierra. En junio primero comienza la temporada de ellos en el año, período que concluye hasta el 30 de noviembre, aunque la mayor cantidad de fenómenos suele presentarse en los meses de julio y agosto.

Hay dos zonas de huracanes, las del Atlántico por donde se presentan los fenómenos que afectan el litoral de Tamaulipas y de ellos, para la Comisión Nacional del Agua en sus pronósticos considera que habrá hasta 10 Tormentas Tropicales, unos cinco Huracanes de categoría uno y dos y quizá cuatro de categoría tres a cinco, por tanto, casi una veintena que podrían colarse hasta el golfo de México, aunque algunos de ellos, con en años anteriores podrían cursar hacia la parte norte de América y tocar tierra en la Costa Este de los Estados Unidos.

Hablar de Huracanes, implica vientos fuertes, lluvias torrenciales, marejadas ciclónicas, inundaciones en zonas costeras e interiores, corrientes de resaca y hasta tornados.

La dimensión de este tipo de fenómenos se mide a través de la escala de Saffir-Simpson, que hace una clasificación de cinco categorías según la velocidad del aire.

Llegar a la temporada de huracanes en el año, hace recordar a las poblaciones sobre los estragos sufridos en el año anterior o los que fueron devastadores en otro tiempo, dado que, pueden causar muertes y destrozos, su variación está en relación directa con la intensidad del aire que acompaña la tormenta y el tiempo de duración de las lluvias, la ruta de la tormenta y el tipo de edificaciones en la zona, el terreno y la condiciones del suelo.

El inicio de la temporada de Huracanes, es para que, la población que habita las zonas del litoral del los países que dan al Golfo de México y al Océano Atlántico, se preparen para el abordaje de los riesgos y por tanto, debe pensarse en desalojar los sitios que pudieran implicar amenaza para la población y los daños a la infraestructura, para ello existen rutas de evacuación que las personas deben de conocer para disminuir los riesgos.

Al llegar el tiempo de fenómenos meteorológicos, la población debe familiarizarse con el lenguaje y la información, por ello desde los municipios, entidades federativas y la República misma, se circula información relacionada con la predicción de los fenómenos a fin de que, la población tome las medidas adecuadas para enfrentarlos.

La gran ventaja para los habitantes es que, las tormentas son rastreadas en cuánto presentan potencial de convertirse en un ciclón tropical, sin embargo, es difícil predecir con exactitud la ruta de la tormenta, por ello se ilustra como un cono con el cual se puede dibujar el curso y a partir de ello, se emiten alertas diarias en preparación para los habitantes de los litorales.

Instituciones como la Comisión Nacional del Agua en México o bien la National Oceanic Atmospheric Administration, NOAA, en Estados Unidos, son las agencias que dan seguimiento a los Huracanes y los responsables de emitir las alertas para las zonas de afectación y deben de hacerlo con 48 horas de anticipación ala materialización del fenómeno porque solo así se podrán llevarse a cabo las acciones de protección a la población.

Como el riesgo está en función de las personas, en Tamaulipas, están ubicadas como prioritarios los municipios de Tampico, Madero, Altamira, Aldama, Soto la Marina y Matamoros, porque concentran la mayor parte de la población del Litoral, por ello, cuando hay aviso de Huracán y la ruta implica el sur o norte de Tamaulipas, de inmediato se genera una gran movilidad, porque el fenómeno puede ocasionar muertes y daños cuantiosos en las zonas pobladas.

Sin embargo, hay una región grande en Tamaulipas, que representa menos riesgo frente a los huracanes, esta es la parte central del Litoral, porque la densidad de población es menor, como sucedió con el huracán Emily el 20 de julio del 2005, que entró por la parte central de la Laguna Madre y aunque causó destrozos a la infraestructura agropecuaria y ganadera, los daños a personas fueron contados.

Se supone que la reacción de los tamaulipecos ante los Huracanes ya es algo natural, sin embargo, se requiere la conducción de las medidas preventivas por parte de la Coordinación Estatal de Protección Civil y que, los Gobiernos Municipales de las zonas vulnerables, para aterrizar una estrategia bien diseñada a favor de la población ya sea para evacuaciones y para ello, la apertura de albergues en los cuales pueda generarse seguridad a las personas.

En el 2019, el Servicios Meteorológico Nacional en su misión de detectar la formación de ciclones y prevenir los riesgos derivados de la actividad ciclónica emitió para el Océano Atlántico 210 avisos de ciclón tropical, generó 304 mapas de vigilancia meteorológica y 145 avisos de baja presión con potencial de desarrollo ciclónico, por tanto hubo información de valor para que, autoridades y población actuarán en función de las necesidades que cada evento pudiese requerir.

Para este año la misma vigilancia ya está en marcha, aunque se nota la ausencia de la Comisión Nacional del Agua, para liderar ese asunto de la temporada de Huracanes, mientras que en las entidades del litoral del Golfo de México, solo ha dado paso a la información de medios, sin que haya claridad respecto a los recursos humanos, materiales y financieros que existen para enfrentar la temporada de huracanes.

Eso sí surgió a fines de la semana pasada información respecto a la determinación del Gobierno Federal para cancelar los recursos de los Fondos para la atención de los desastres naturales que existe y a los cuales se puso atención desde la parte legislativa en 2009, año en el que, se aprobó una propuesta de los Diputados de la Cámara Federal, para que se reforzara el Fondo de Emergencia para los desastres naturales.

Respecto ala nomenclatura de establecida por NOAA para los huracanes que puedan desarrollarse en el Golfo de México, aparecen los nombres de Arthur, Bertha, Cristóbal, Dolly, Edouard, Fay, Gonzalo, Hanna, Isaías, Josephine, Kyle, Laura, Marco, Nana, Omar, Paulette, René, Sally, Teddy, Vicky y Wilfred.

Desde luego, no se trata de sentarse a esperarlos, más bien, el inicio de la temporada de Huracanes, es una invitación para que la sociedad se prepare para los Huracanes de este año, aunque las predicciones indican que cuatro de los casi 20 fenómenos podrían ser de gran magnitud y para los cuales la preparación implica organización social.