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Maestros, expectativa salarial alta.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

Maestros, expectativa salarial alta.

Los maestros de Tamaulipas quieren, si se puede, más de un cinco por ciento de aumento directo al salario y están en desacuerdo que en la negociación que se lleve a cabo, el porcentaje quede alrededor del tres por ciento, porque eso fue lo que obtuvieron el año pasado y, tras el aumento en los precios de los combustibles en enero, las cosas se complicaron en las familias de los trabajadores de la educación.

De acuerdo al programa político que incide en la celebración del Día del Maestro, el martes venidero, dirigentes sindicales y funcionarios de la Secretaria de Educación de la entidad, se sentarán en torno a mesas de negociación para definir que sí y que no habrá para los responsables de la aplicación de la Reforma Educativa.

El secretario General de la Sección 30 del SNTE, profesor Rigoberto Guevara Vázquez, comentó respecto a la definición del aumento, que el comité nacional que tiene a su cargo el maestro Juan Díaz de la Torre, trabaja desde hace varias semanas con el equipo financiero del Presidente Enrique Peña Nieto y, en virtud de la descentralización de la educación, deja en libertad a las dirigencias en los estados del país, para que negocien un porcentaje adicional y se empleen a fondo para obtener mejoría en las prestaciones que les corresponde como empleados de una institución pública.

Se antoja difícil pensar que la negociación que inicia este martes y debe de concluir el 15 de mayo, no genere acuerdos positivos para los trabajadores de la educación, ya que, desde la perspectiva laboral y política, se mantienen al pie del cañón a efecto de cumplir con los tamaulipecos.

Incluso, por la buena relación que los trabajadores de la educación, tienen con el Gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, la expectativa es grande y si a ello se añade que el dirigente del PAN en la entidad es un maestro, Francisco Elizondo Salazar, sólo queda confiar en que, quienes se sienten en las mesas de negociación con los maestros, tendrán capacidad resolutiva y se pondrán del lado de los sindicalistas.

Además, Guevara Vázquez y el dirigente estatal del PAN, son paisanos, matamorenses, para ser exactos y les caracteriza su intención de hacer bien las cosas a favor de Tamaulipas.

Para cerrar la pinza y ampliar la esperanza económica de los trabajadores de la educación, hay que comentar que el titular de la SET, Héctor Escobar Salazar, también es de Matamoros, así que, será entre matamorenses de donde salgan las primeras líneas de los acuerdos, ya que, las finales tienen que ver con la intervención de los responsables de las finanzas y de la política en la entidad.

Según la información del maestro Guevara Vázquez, el martes se instalan cuatro mesas de negociación para el tema del aumento salarial, las prestaciones laborales, la de becas, la de estímulos y una más que tiene que ver con los aspectos sociales.

Para el arranque de las negociaciones, existe un pliego que maneja el comité nacional del SNTE y que, se armonizó a las circunstancias de cada entidad y del cual se espera un gran respaldo de los Gobernadores, porque fuera de entidades como las del sureste mexicano, en el resto, os profesores cumplen a cabalidad con lo que les toca hacer para mejorar la calidad de la educación.

En Tamaulipas, ya se trabaja sobre la confección de un modelo educativo que aporte más tanto a la calidad como al aprovechamiento de los alumnos.

Uno de los puntos que resaltó el dirigente de la Sección 30, es el de la homologación, para que todos los maestros de la entidad sean considerados para la zona económica del cien por ciento, es decir, que los de Victoria, Mante, Tula y Jaumave, ganan lo mismo que los de la faja fronteriza, lo que podría fin a eso de las zonas económicas del 60 y 100 por ciento.

Además, esto debe entenderse como una evolución natural, porque en materia de salarios mínimos, ya es parejo en todo el país.

El asunto es que nadie habla de cuánto costaría que en la entidad funcione una zona económica, frente a lo cual, la Secretaria de Finanzas del Gobierno, ya debió de echar cuentas y considerar cuándo sacará del morral para respaldar a los trabajadores de la educación.

Cuán mejor estuvieron las relaciones entre los maestros y el Gobernador, el porcentaje de aumento salarial pactado en las mesas de negociación fue superior al 4.5 por ciento, por tanto, si se habla de mejores circunstancias entre los sindicalistas y la dependencia que maneja Escobar Salazar, la mirada está puesta por encima del cinco por ciento, no le hace que en la Federación el porcentaje pueda ser menor.

Prueba de las relaciones adecuadas entre el estado y la Sección 30 de maestros, es que hace poco el Gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, otorgó becas a más de tres mil hijos de profesores, para que le echen ganas al estudio y sus padres puedan mantener su atención en la tarea de educar a los otros niños y jóvenes.

Son poco más de 45 mil trabajadores de la educación los que tienen la mirada puesta en el Secretario Escobar Salazar y su equipo de trabajo, en lo que digan tanto las secretarías de Finanzas como la General de Gobierno, responsables de que los acuerdos económicos y políticos se firmen.

Por su lado el maestro y Diputado local, Oscar Martín Ramos Salinas, tiene la encomienda de su organización sindical de sacar un acuerdo Legislativo a través del cual los recursos económicos destinados por la SEP para mejorar la infraestructura educativa, se ejerzan al cien por cien, no le hace que exista un desfasamiento en lo que va del año, porque de más de 600 millones de pesos que el Instituto Tamaulipeco de Infraestructura Educativa, debió de ejercer para beneficio de las escuelas, apenas lleva 80 millones.

Según los datos que tienen dirigentes de la sección 30 del SNTE, son más de mil 700 millones de pesos los que deben invertirse en la modernización de las instalaciones educativas de Tamaulipas, durante este año. El asunto es que debe hacerse más rápido, para evitar el inejercicio de los recursos y por tanto su devolución a la Federación, misma que podría reasignarlos a otra entidad del país.