Columnas

No rotundo a partidos nuevos.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

No rotundo a partidos nuevos.

El hecho de que el Partido Regeneración Nacional se haya alzado con triunfos electorales en los procesos recientes, alienta, de alguna manera a los grupos sociales para formar nuevos partidos políticos, sin embargo, vale la pena considerar que, en los últimos tiempos, los partidos nuevos, así como nacen, desaparecen.

El Partido Social Demócrata, Mexicano de los Trabajadores, Popular Socialista, Mexicano de los Trabajadores, Comunista México, Socialista Unificado de México, Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional y Auténtico de la Revolución Mexicana, funcionaron en diferentes etapas, pero, se agotaron, la gente que participó en su fundación los dejó y con la determinación establecida en las Leyes electorales de desactivar a aquellos que no lleguen al porcentaje mínimo, deben de colgar el membrete.

Con las últimas tres elecciones, la situación fue difícil para partidos como Nueva Alianza, el llamado partido de los maestros gordillistas, el del Trabajo, Encuentro Social y de la Revolución Democrática, al grado que, la mayoría de ellos están fuera de jugada política del 2021, 2022 y 2024, quizá el único que podría salvarse para una elección, es el del Trabajo, ya que, su alianza con Regeneración Nacional en el 2018, le permitió brincar la tablita y evitar la cancelación de su registro.

En partido nacional que viene, es el de los Calderón, doña Margarita Zavala de Calderón y su marido el expresidente Felipe Calderón Hinojosa, que está en formación.

También comenzó a hablarse de que, algunas organizaciones que operan para proteger intereses de mexicanos en algunas entidades del país, como la que enlista y da tarjetones para que los propietarios de vehículos ilegales puedan circular sin tener la presión de las autoridades de tránsito o las policiacas, les puedan quitar las unidades porque no están regularizados o nacionalizados.

La Organización Nacional para la Protección del Patrimonio Familias de Tamaulipas, A.C., ONAPPAFA, podría convertirse en partido político, según lo hizo ver Miguel Moreno Brizuela, presidente del Frente por la Cuarta Transformación, quien considera que la oportunidad es inmejorable, porque el Partido de Regeneración Nacional que fundó el presidente de la República, Andrés López Obrador, comenzó a fallarle y se convierte en un lastre para el mandatario.

Quizá vale la pena medir el alcance de las palabras de quienes con la mano en la cintura hablan de formar un partido políticos, sin percatarse de todo aquello que entraña y que, debe de llevarse a cabo para lograr la aprobación del partido, incluso, hasta podría considerarse sin temor a equivocaciones, que, para los procesos electorales venidero, además de los partidos grandes y medianos, podría estar el de los Calderón, denominado México Libre, porque han seguido los pasos establecidos en la Ley y le dedican tiempo a cumplir con todos los puntos.

Ya van en la realización de las Asambleas Estatales y Distritales, que son exitosas en los puntos programados, pero, de ahí en fuera, el curso de otras intenciones para crear más partidos políticos, es difícil, ya que, el asunto no es de lengua y jarabe de pico, requiere de trabajo y de documentar cada paso que se dé.

Si la gente de ONAPPAFA, en realidad, primero deberá de convertirse en una organización de resultados porque hasta ahora solo vende la ilusión de que los vehículos que tiene enlistados ser nacionalizarán y a pesar de que se sumaron al proyecto del presidente López Obrador en el 2018, la realidad es que nadie de la administración federal les ha hecho caso.

Con esas dos cosas, el listado y la ilusión, no será suficiente para convertirse en partido político y menos, si se agrega que los dueños de vehículos ilegales, no están preparados para hacer más aportaciones a los directivos de ONAPPAFA, a fin de que cubran los gastos requeridos para la construcción de un partido más en México.

Ahora bien, la realidad de los partidos políticos, es que los ciudadanos, con todo y que llevaron a López Obrador a la Presidencia, no creen en los partidos políticos, incluso, los maestros que apoyaron con todo a la profesora Elba Gordillo Morales en su capricho de darle forma al Partido Nueva Alianza, parecen no estar dispuestos a un proyecto más de esa naturaleza.

A donde ha acudido la exdirigente de los maestros del país y habla de un partido político más a formar, no tiene eco, sus compañeros apenas pueden expresarse contentos porque la sacaron de la cárcel y está de nuevo en acción para rescatar el Sindicato de maestros, pero, al tocar el punto de otro partido, los profesores prefieren no hacer compromisos, quizá en gratitud al presidente López Obrador, quien les cumplió ya con la cancelación de la Reforma Educativa promulgada por el expresidente Enrique Peña Nieto y promulgó la de él el pasado 15 de mayo, fecha en que se celebró el Día del Maestro.

El encargado de ONAPPAFA, será quien se encargue de echar a andar las actividades para darle forma al partido político en Tamaulipas, empresa que será mucho más complicada que convencer a los ciudadanos de que enlisten sus vehículos para que nadie se los quite y les pongan una placa de la organización de protección al patrimonio familias.

Ahora bien, si se trata de partidos nuevos locales, también la percepción de la ciudadanía es que no se necesitan y aunque la Constitución Política de México y las Leyes Electorales dan esa opción, en Tamaulipas el interés es mínimo y como Moreno Brizuela trae la mira alta, porque apoyará que se estructure un partido nacional, queda fuera la posibilidad de que una intención estatal.

La apertura de registro para nuevos partidos, comenzará una vez que el proceso electoral 2019-2019, que se llevó a cabo para la elección de los diputados que conformarán la próxima Legislatura de Tamaulipas, esto es después de septiembre, ya que, de aquí a ese mes deberán resolverse las inconformidades presentadas por dirigentes de partidos y ciudadanos sobre el proceso de este año que fue ganado por el PAN, porque tendrá mayoría en el Congreso del Estado.