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Normarán fabricación de bolsas de plástico.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza.

Normarán fabricación de bolsas de plástico.

Cierto que la sociedad hace esfuerzos considerables para reducir el uso de plástico en su vida diaria, convencidos de que, el planeta necesita de un respiro y con ello reducir los altos niveles de contaminación, pero, además de la sociedad, la propia industria del plástico ha entrado al aro.

El punto es que, el Comité Técnico de Normalización Nacional de la Industria del Plástico, COTENNIP, propuso la creación de directrices para la recuperación y el reciclado de los residuos plásticos, encaminado a que, se convierta en una Norma o de menos en un documento que deba de ser observado por aquellos que tienen injerencia en la industria del plástico.

Tal intención está inscrita en el programa Nacional de Normalización para este año que fue publicado en el Diario Oficial de la Federación por la Secretaría de Economía y se maneja como tema adicional a los estratégicos, considerándolo como nuevo a ser iniciado, con posibilidad de que se desarrolle a manera de norma.

El objetivo del COTENNIP, es que, se propicie la orientación para el desarrollo de especificaciones y procedimientos que cubren la recuperación de desechos plásticos, en los que se incluye el reciclaje.

El proyecto presentado por el Comité Técnico, considera varias opciones para esa recuperación derivadas de fuentes pre-consumo y post-consumo.

Al mismo tiempo, pretende establecer los requisitos de calidad que deben de considerarse en todos los pasos del proceso de recuperación y precisar las recomendaciones generales para su inclusión en los estándares de materias, pruebas y especificaciones de productos

Porque la industria del plástico requiere de una infraestructura global sostenible para la recuperación y el reciclaje de plásticos, y de un mercado sostenible para los materiales plásticos recuperados y sus productos derivados de una manufactura, es fundamental que haya un documento normativo que muestre dichas bases y para ello se pretende echar mano de la norma internacional ISO 15270:2008.

Esta propuesta del Comité Técnico está en el proceso de fundamentación y esperan que para fines de año se convierta en un proyecto que, tras ser analizado por la Secretaría de Economía, se convierta en una norma mexicana.

Una propuesta más enfilada la creación de una norma, es la que, publicada en el Diario Oficial de la Federación de este viernes 26 de abril de 2019, relativa a las bolsas de polietileno de baja densidad y de polietileno de alta densidad, reutilizable para el transporte de productos, especificación que deben de cumplir y los métodos de prueba que pueden llevarse a cabo para comprobar el bajo grado de contaminación ambiental que generan.

El objetivo de la propuesta es crear las especificaciones mínimas que deben cumplir las bolsas tipo acarreo destinadas al transporte de productos que son distribuidos en comercios, y que contemplan aspectos ambientales y métodos de prueba para determinar tales características para su reutilización en condiciones habituales.

Ante la perspectiva que se tiene de la bolsa de plástico, surge la necesidad de generar una norma que regularice las características mínimas de este producto, alineado con la creciente concientización del cuidado del medio ambiente por parte de gobierno, sociedad e industria.

Así también se busca fomentar el reciclado, el consumo responsable de las bolsas tipo camiseta y correcta disposición al final de su vida útil.

Ya sabemos que hay esfuerzos de algunos gobiernos para poner fin al uso de este tipo de bolsas, situación que se vive en Tamaulipas, donde las autoridades estatales a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, hicieron un intento por sacar de circulación las bolsas de plástico en las que se transportan los artículos adquiridos en tiendas comerciales, sin embargo, el titular de la dependencia Gilberto Estrella Hernández, ha dado largas a la aplicación de la Ley que generó, porque no tiene los instrumentos ni de vigilancia ni sancionadores.

Fue como una llamarada de petate, porque la anunció y se retractó, dijo que la Ley entraría en vigor en enero de este año y tampoco pudo implementarla.

Da la impresión de que Estrella Hernández, incluyó en la legislación la medida y que, se sentó a esperar que los gerentes de las tiendas comerciales la acataran nada más porque sí y, aunque no se hicieron de la vista gorda, hubo quienes pidieron plazo para adquirir bolsas de plástico biodegradables o las que propone el Comité Técnico de Normalización de la Industria del Plástico, que deben de producirse bajo el amparo de una norma mexicana, que podría basarse en lo previsto en otras normas como las normas la UNE 53942:2015 y la ABTN NBR 14937:2010.

La primera de ellas, es una norma española para la bolsa de polietileno (PE) reutilizable para el transporte de productos distribuidos al por menor, que prevé los requisitos particulares y métodos de ensayo para probar que no afecta al ambiente y puede ser) reutilizable para un número mínimo de 15 vueltas de uso en condiciones habituales.

La segunda norma, es con el mismo fin, pero, corresponde a la Legislación brasileña que está vigente desde el 2010.

Si la Industria del Plástico le entra a estas dos actividades, México avanzará más rápido en este asunto de evitar la contaminación ambiental por el uso indiscriminado de este tipo de productos y que no pueden sacarse de la vida diaria, porque forman parte de la cultura de los mexicanos.

Nadie que vaya al súper o a las tiendas de la esquina, sale a gusto con las compras que hizo, si no lleva su mandado en una bolsa de plástico, en asunto es que, una vez creada la normatividad para que su fabricación sea biodegradable o de plano como las de España y Brasil que deben de usarse unas 15 veces, autoridad como la de Gilberto Estrella Hernández, no servirá de nada.

Obvio, a esto de las bolsas hay que agregar el tema de los popotes de plástico, vasos, platos y todo aquello que forma parte de la vida de los mexicanos, que, tiene que limitarse para favorecer el equilibrio ambiental.