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¡QUE GANE MEXICO!

HIPÓDROMO POLÍTICO

POR CARLOS CORTES

¡QUE GANE MÉXICO

Faltan 91 días para la elección del próximo domingo primero de julio, en donde los mexicanos deberemos decidir quien habrá de encabezar los esfuerzos de este proyecto que se llama México durante los próximos seis años. Y más allá de quien gane y quien pierda, quien debe triunfar es el pueblo de México, quienes somos los que mantenemos este país somos los mexicanos.

Y me parece que a partir del día dos de julio próximo, el país y los mexicanos deberemos prepararnos para entrar a una nueva época que esperamos sea de progreso y bonanza para todos. Pero para lograrlo, todos debemos participar en cambiar al país: lograr un cambio de rumbo, un cambio de actitud, un cambio de visión, independientemente de quien vaya a gobernar a partir del próximo primero de diciembre.

Por hacer una breve radiografía de nuestro México analicemos cuatro aspectos de la vida cotidiana del país: pobreza, homicidios, corrupción e impunidad, sólo la punta del iceberg.

En México, el nuevo gobierno y la sociedad mexicana debemos todos de trabajar en el cambio del modelo económico al que sufrimos hoy. En los últimos ocho años, la pobreza extrema disminuyó en el país, pero el número de pobres aumentó, de acuerdo con información sel Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

En su informe de Evaluación de Política de Desarrollo Social 2018, CONEVAL señala que entre 2008 y 2016, la pobreza aumentó en 3.9 millones de personas; pero al mismo tiempo 2.9 millones de personas dejaron de estar en situación de pobreza extrema. De esta forma, a nivel nacional, en 2008 había 49.5 millones de personas en situación de pobreza (44.4 por ciento del total de la población), mientras que, en 2016, se registraron 53.4 millones de personas, es decir 43.6 por ciento de la población nacional.

El tema de la violencia también es un asunto que ha frenado de manera grave el tema del desarrollo. Al cierre de 2017, México alcanzó la cifra de 29,168 homicidios intensionales, la cifra más alta desde que se leva dicho indicador desde hace veinte años, y que representa un incremento del 27 por ciento con respecto al cierre del 2016. ¿Grave? Gravísimo dirìa yo. Ello representa que cada día de 2017 se consumaron 80 homicidios en promedio en el país.

El el tema de la corrupción, Transparencia Internacional recientemente dio a conocer la medición de Índice Global de Corrupción para el año 2017. México volvió a caer una vez más para ubicarse en el penoso lugar 135 de 180 países evaluados, obteniendo 29 unidades, quedando muy rezagado del promedio mundial que es de 43.

La medición de 2017 mostró que México es tan corrupto como República Dominicana, Honduras, Paraguay, Rusia, Bangladesh, Papua Nueva Guinea, Bangladesh y Guatemala, entre otros.

Los países con mejores calificaciones en la lucha contra la corrupción son: Nueva Zelanda, Dinamarca, Finlandia,, Noruega, Suiza, Suecia, y Singapur.

Y en contraparte, los países considerados más corruptos son Sudán, Yemen, Afganistán, Siria y Somalia. Lamentablemente, al día de hoy México está más cerca de los últimos lugares de la tabla

A nivel de los países del continente americano el promedio de combate a la corrupcion fue de 44 puntos, lo cual también pone a México en una posición incómoda. Los mejores promedios del continente se lograron en Canadá, Estados Unidos, Uruguay y Chile. Y los peores resultados en la región se dieron precisamente en México, Honduras, República Dominicana, Paraguay, Guatemala, Nicaragua, Haití y Venezuela.

La corrupción además de desincentivar las inversiones reduce la competitividad del país, también inhibe la rendición de cuentas, el acceso a la información pública y la transparencia, lo que mina la confianza de los ciudadanos y empobrece a los países.

En esta medición de Transparencia Internacional 32 países de África están mejor evaluados que México, lo que demuestra el fracaso del sistema nacional anticorrupción, las deficiencias de la Secretaría de la Función Pública y la impunidad de la que gozan los ex gobernadores, entre otros elementos.

En el tema de impunidad, los índices en México siguen en ascenso. En 26 de los 32 estados se agravó el porcentaje de delitos que no se esclarecen y, en promedio, menos del 4 por ciento de las denuncias tiene algún resultado. ¿El motivo? El país tiene la mitad de los policías que, como mínimo, se necesitan, hay déficit de fiscales que indaguen delitos, y hay cuatro veces menos jueces que el resto del mundo, entre otras cosas.

El Índice Global de Impunidad México 2018, estudio, elaborado por cuarto año consecutivo por la Universidad de las Américas de Puebla (UDLAP) utiliza 32 variables relacionadas con la eficiencia y la estructura del sistema de justicia, muestran datos contundentes: 93 de cada 100 delitos que se cometen en el país ni siquiera se denuncian. Y en la minoría de los ilícitos que se sí reportan ante un Ministerio Público, las investigaciones no llegan, casi nunca, a una sentencia contra los implicados. De ese tamaño es el problema y de ese mismo tamaño es el reto.

Por eso reitero: quien debe ganar el próximo primero de julio debe ser México. Por eso, en lo personal, sigo esperando las propuestas y los comos las vamos a realizar, porque ya requerimos ver resultados. Los mexicanos nos los merecemos y el país no puede esperar más. ¡Qué el próximo primero de julio gane México!

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