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¿QUIÉN TRAICIONÓ A MATEO VÁZQUEZ?

POSDATA

GASTÓN ESPINOSA GLZ.

¿QUIÉN TRAICIONÓ A MATEO VÁZQUEZ?

Esa podría ser la pregunta. ¿Quién lo traicionó?

Lo cierto es que el escenario para Mateo Vázquez Ontiveros no luce tan optimismo como cuando arrancó su larga y desgastante campaña por la presidencia municipal de El Mante.

Varias cosas se hicieron mal.

Por principio de cuenta fue muy desafortunada su decisión de empezar una andanada de críticas en contra de la administración municipal de Juan Francisco Leal Guerra. Mateo fue quien estuvo haciendo campaña en favor del actual alcalde mantense, era quien lo presentaba y avalaba por su actuar, tan es así, que no dudó en aceptar ser el alcalde suplente. Los ataques en redes llegaron incluso a raspar al propio gobernador del estado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Desde ese momento las cosas empezaron mal.

Sus asesores no le dijeron que más que hacer campaña y convencer a delegados o comisariados ejidales, lo primero que debería hacer es hacerse notar en gobierno del estado, trabajar a la par de la autoridad municipal y sobre todo cimentar su relación con el gobernador. Lejos de eso, Mateo y su equipo se fueron por el camino equivocado; anticiparon a su conveniencia en reloj político sin cumplir la elemental regla política de no brincarle las trancas a la autoridad.

Y cuando estaba en lo más álgido de su campaña, Mateo no supo negociar su capital político, creyó que la fortaleza de su agrupación política lo sacaría a flote, que lo harían ganar la presidencia municipal, por eso continuó con un error garrafal; ser desconocido por el gobernador, un gobernador que no se deja sorprender por escaramuzas, ni berrinches. Por lo tanto, Vázquez Ontiveros le apostó a su proyecto personal, no al proyecto del gobernador. No quiso trabajar en equipo, creyó en las promesas de otros, pensando que quizá ellos doblegarían la voluntad de los que mandan en Tamaulipas.

Otra parte esencial de sus errores estriba en el hecho de cambiar de asesor político en la recta final, lo que derivó en una caída estrepitosa de su campaña en lo territorial aunque subió su presencia en las redes sociales, -un termómetro poco confiable para medir el grado de aceptación-.

Hoy Mateo Vázquez a través de sus grupo de partidarios no puede decirse engañado. Nadie le prometió nada, nadie en gobierno le aseguró que lo haría ganar, nadie de los que mandan le juró que sería candidato…Mateo se engañó solito. Y es que en lugar de andar en bingos debió andar en la capital del estado, en lugar de andar prometiendo chambas debió hacer amigos, en lugar de promoverse en face debió conocer bien a Cabeza de Vaca y a César Augusto Verástegui.

La falta de un buen consejero político le ha llevado a cometer errores trascendentales en su objetivo político. No se trata de un mal tipo o de un mal personaje, de hecho le queda un saldo de credibilidad que debe aprovechar para rescatar algo de lo perdido, porque la protesta, las marchas o declaraciones fallidas de sus aliados no son el mejor camino y eso ya lo comprobó.

En el resultado de su proyecto sólo Mateo tiene responsabilidad.

Cuando se juega de forma irrespetuosa, anticipada y chapucera, siempre se juega a perder.

PD: Para conocer bien a Truko Verástegui hay que tenerlo como enemigo por un tiempo. El lado B de Truko dice que se traga ofensas y aguanta callado, pero llegado el momento no olvida. Jaque mate.

TERCERO EN DISCORDIA O CORTINA DE HUMO

Lo peor del caso es que se lo cree.

Anda desatado. Don Eloy Martínez no es un tercero en discordia, quizá suena mejor decirlo, es una cortina de humo.

Por lo pronto ya mostró otra cara, la de la egolatría. Ya ordena a funcionarios, ya armó su equipo de campaña y ya se siente alcalde.

Qué pena para don Eloy, lo cierto es que su proyecto político pende de un hilo muy delgado porque no se cimentó con trabajo efectivo; lo mandaron al Gólgota.

Y mientras él se la cree en el PRI ya se relamieron los bigotes.

La versión cañera de “Layín” –aquel alcalde que robó poquito- anda mareado.

EL REGISTRO DE TINO

El próximo sábado a las once horas, el llamado “campeón del nepotismo”, Tino Sáenz Cobos, habrá  de presentar su solicitud  de registro para contender por el VI distrito electoral por el PRI. El evento se realizará en el salón “Reyes Heroles” en la sede estatal del Partido Revolucionario Institucional en ciudad Victoria.

Por el lado del PAN todo está previsto para que Vicente Verástegui Ostos sea el virtual candidato a la diputación federal por el sexto distrito mientras que por Morena se maneja la versión de que Javier Villarreal Terán será el contendiente.

ES TIEMPO DE NUEVAS CARAS EN EL PRI

Coincido con Maricruz Pardo cuando dice que es tiempo de que el PRI debe darle la oportunidad a nuevos cuadros. Por eso, alentada por amigos y simpatizantes alza la mano para pedirle al PRI que al tome en cuenta. Madre de dos hijos y catedrática de profesión, Maricruz cree que es momento de que su partido le dé oportunidad a otros y no a los de siempre. “Quiero trabajar por mi pueblo. La gente me conoce, conoce a mi familia, sabe que somos gente de trabajo, que no nos vamos y que siempre nos quedaremos aquí. Nunca hemos ocupado de cargos para servir a quien lo necesite, somos gente de bien y de mucho esfuerzo diario”.

Y con su buen actuar pone al PRI en una encrucijada. O le apuesta a los mismos o se arriesga a perder en las urnas, porque es evidente que el malestar es generalizado. No se escucha de ella mala palabra hacia la autoridad municipal emanada de su partido, los respeta mucho, pero sí considera que el PRI debe abrirse a la ciudadanía y no a un grupo solo.

No hay que perderle de vista. Hay talento de sobra, capacidad probada, vocación de servicio efectivo, preparación y muchas ganas de trabajar por la gente de Nuevo Morelos. Si el PRI quiere que le vaya bien debe darle la oportunidad a Maricruz, si quiere condenarse a la mala imagen y ser cómplice de un mal gobierno que siga con los mismos. Que no diga que nadie les dijo.