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RENOVACION DEL PRI

Tribuna

Por Javier Terrazas

RENOVACIÓN DEL PRI

En el Partido Revolucionario Institucional de Tamaulipas habrá renovación en el corto plazo.

Será por designación del Comité Ejecutivo Nacional que preside en forma interina Claudia Ruiz Massieu, debido a que no hay tiempo para convocar a una elección en el seno del consejo político estatal.

Enfrenta por tanto, esa directiva provisional central, el reto de la designación que debe ser muy bien pensada, pues ésta tiene que generar condiciones para la recuperación.

Tamaulipas no puede verse como cualquier estado de la república, porque el estado es la suma de sus regiones.

Dentro del perfil del nuevo dirigente se obligan  la experiencia, el conocimiento de la clase política de las regiones y municipios,  liderazgo,  estatura ideológica y discursiva, así como honestidad.

Cualquiera que se anime a buscar la dirigencia tendrá que pasar por la criba de los perfiles que con esas u otras cualidades analice la dirigencia nacional para el fallo.

Tamaulipas aparece en una larga lista de por lo menos veinte entidades del país en donde el  tricolor debe renovarse para ir a los procesos locales del 2019.

Pero entre ellos, figura como prioridad, por lo que lo es viable que antes de tres semanas se estrenen por la vía de prelación, presidente y secretaria general en el Comité Directivo Estatal.

Hay una larga lista  conformada por los viables, probables, interesados y factibles.

La clase política estatal del tricolor tiene dos alternativas, una reconfiguración para su resurgimiento o la desbandada hacia las filas de MORENA o el PAN.

Habrá en la militancia quienes vayan por la primera opción y aquellos que se enfilen por la segunda e incluso a cualquiera otra fuerza política.

Una forma de que los priístas se mantengan firmes es si los convence la nueva dirigencia.

De ese tamaño es la importancia de que de la decisión central, para que sea la más pertinente para la circunstancia y la estructura geopolítica de la entidad.

Personajes que son activos importantes del tricolor y que podrían meterlo a la pelea aparecen figuras como Oscar Luebbert Gutiérrez,  Baltazar Hinojosa Ochoa o Enrique Cárdenas del Avellano.

En un segundo plano, más frescos y también con experiencia política y presencia estatal aparecen Edgar Melhem Salinas, Alejandro Etienne Llano y Humberto Valdez Richaud.

Todos ellos además de cargos de elección popular han pasado por encomiendas administrativas relevantes.

Hay otro grupo de cuadros más jóvenes, con cierta experiencia, pero sin la presencia estatal sólida, aunqie si con conexiones en el centro y con mucho ánimo como los casos de César García Coronado y Yahleel Abdalá Carmona.

Y algunos de trabajo local y agallas para hacer una buena labor, pero sin la proyección estatal personal que les ayude a fortalecerse como alternativas,  Alejandro Torres Manzur  y Emilio Grimaldo.

¿A qué quiere jugar el PRI en el 2019? De ello dependerá la decisión que tome.

Sin duda, la solución tricolor está “en chino”.

Y no precisamente  Chong, quien parece tiene su “gallo”.