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Traición azul

Tribuna

Por JAVIER Terrazas

Traición azul

Parece que el sueño del Partido Acción Nacional de ganar la gubernatura de Coahuila, con la estrategia de descalificar a los Moreira, se está complicando.

La selección del candidato a gobernador por parte de ese partido, se le salió de control.

La democracia que pregona Ricardo Anaya, dirigente nacional, se le quedó el escritorio.

Hubo un proceso muy cargado hacia uno de los prospectos fuertes, Guillermo Amaya.

Desestimó las peticiones y propuestas del Senador Luis Fernando Salazar, otro de sus cuadros sólidos.

Y en un proceso amañado, montado y armado para uno solo de los aspirantes, la desconfianza en el favorecido por el dedazo, crecerá.

Al virtual candidato a gobernador por el PAN le derrotó el actual gobernador Rubén Moreira, en el marco de toda una estela de sospechas y acusaciones en contra de su hermano Humberto.

Repetir con un perdedor quizá no haya sido la mejor solución, pero sobre todo, lo cuestionable es que el proceso de selección fue una simulación.

Lo denuncia y subraya el molesto Senador con licencia Luis Fernando Salazar, al citar tres irregularidades.

1.- Rasuraron todas las preguntas de la encuesta que revelarían aspectos negativos de los aspirantes

2.-.Se autorizó un método de evaluación que hizo un aspirante apócrifo, que ni siquiera compitió

3.- Se registraron para la encuesta aspirantes apócrifos, inelegibles porque no se separaron de su cargo,  lo que diluyó el resultado de la encuesta.

Quizá pueda señalarse que es el pataleo normal de un perdedor de la encuesta. Pero en cada uno de los tres puntos, le asiste la razón.

Por ello, Salazar acusa a su dirigente nacional Ricardo Anaya de traicionar su confianza, al manipular de esa forma el método y proceso interno.

Un vil dedazo de los que tanto acusa el “Chicago Boy” a sus adversarios del PRI.

No será suficiente el respaldo que tres débiles aspirantes panistas dan al proceso de Anaya (Ricardo)  que favoreció a Anaya (Guillermo) y que Salazar califica de “C-Anaya-da”.

Dieron su aval al amañado proceso los aspirantes Isidro López, Silvia Garza y Marcelo Torres.

Habrá que estar a la expectativa, pues lo ideal sería que se repusiera el proceso interno del albiazul, mismo que puede ser impugnado ante el Tribunal Electoral, el Senador Salazar.

O el efecto que ésta fractura cupular en el PAN de Coahuila genera en las bases azules y la sociedad que no percibe la diferencia entre los Moreira y los Anaya.

Y es que el panismo estaba obligado a un proceso interno ejemplar en Coahuila, para un gran arranque en la lucha electoral.

De esa forma, con esos vicios y atropellos será muy difícil alcanzar el reto.

Los Moreira tienen oficio político. Y el factor sorpresa ya no tendrá el mismo peso. Por mucho que pretendan llegar los vientos de cambio desde Chihuahua y Tamaulipas.

Y es que el slogan del albiazul “Por una patria ordenada y generosa; y una vida mejor y más digna para todos”, es un gran fiasco, prevalecen el “amiguismo, compadrazgo y nepotismo”.