«Tamaulipas no es un estado de conflicto»: nuevo Obispo
*En rueda de prensa convocada tras su llegada a esta ciudad, la nueva autoridad eclesiástica dijo que le ha tocado estar como misionero en Perú en la Diócesis Tacna, justo en tiempos del conflicto de Sendero Luminoso creado por radicales izquierdista del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, igualmente estuvo de misionero en Brasil.
María de Jesús Cortez
Para el nuevo Obispo de la Diócesis de Tampico, José Armando Álvarez Cano, Tamaulipas no es un estado de conflicto, menos el sur de la entidad pues asegura que Dios lo ha llevado por caminos difíciles y de marcada inseguridad y ha salido adelante.
En rueda de prensa convocada tras su llegada a esta ciudad, la nueva autoridad eclesiástica dijo que le ha tocado estar como misionero en Perú en la Diócesis Tacna, justo en tiempos del conflicto de Sendero Luminoso creado por radicales izquierdista del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, igualmente estuvo de misionero en Brasil, “allá estuvo peligroso en algunos tiempos”.
Asimismo refirió que le tocó estar en México en ciudades peligrosas como las del estado de Michoacán y últimamente en el estado de Oaxaca, en donde existe pobreza extrema.
Consideró que la violencia se combate con mucha paciencia, fortaleza de espíritu y buen ánimo, “yo creo que ustedes los de Tamaulipas han sufrido ya por tiempo y ahora que yo venía para acá me preguntaban las personas que iba a hacer en un lugar tan difícil, tan violento, pero yo creo que después de venir de Oaxaca, Michoacán, pues el país está de la misma manera”.
Asimismo el nuevo representante de la Iglesia Católica en la zona sur, reconoció que México está pasando por una etapa difícil, esto debido al cambio de gobierno, pues aún se ve el reacomodo.
Dijo que México también atraviesa por el problema de la migración, ya que muchos se quedan en el país, sin posibilidades de trabajo y con cuestiones jurídicas.
Álvarez Cano señala que ante esa problemática, analizará si se abren más casas de atención a los migrantes, “pero vamos a analizar porque no conozco esta tierra, es la primera vez que vengo a esta tierra bendita de Tampico, pero se tendrán que abrir las que sean necesarias que estén en posibilidades en este campo”.
Por último, al ser cuestionado sobre el problema de falta de vocación sacerdotal, Moñseñor dijo que eso no es un problema privativo de la iglesia sino que hay también falta de vocación en el matrimonio y en muchos campos atribuyendo que el problema de la vocación viene más de la familia.
