Turismo sustentable
Tribuna
Por Javier Terrazas
Turismo sustentable
El turismo es una de las fortalezas de Tamaulipas. Son varios segmentos los que pueden encontrarse en la entidad.
Hay que recordar que son 430 kilómetros de litoral en el Golfo de México y que en sol y arena existen siente puntos atractivos con infraestructura.
Miramar en Ciudad Madero; Playa Tesoro en Altamira; Barra del Tordo en Aldama; La Pesca en Soto la Marina; Carbonera en San Fernando; y Bagdad en Matamoros.
Otro de los segmentos es el turismo fronterizo. A lo largo de los 371 kilómetros de frontera con Texas hay 17 puentes internacionales, por los que se dan cruces de un lado a otro para hacer negocios. Sean estos asuntos de comercio, industria o salud, entre los principales.
En destinos como Tampico-Madero, cuyo principal atractivo es Miramar, también hay combinación de turismo cultural, histórico y de convenciones.
Existen en la entidad dos municipios que tienen el nombramiento de pueblos mágicos, Mier y Tula, por lo que están en proceso de mejora de infraestructura para tener mayor dinámica
Sin embargo, hay mucho más segmentos para el turismo, el ecológico, de pesca deportiva (Presa Vicente Guerrero), científico (El Cielo, Gómez Farías); Cinegético (Nuevo Laredo con venado o Abasolo con Paloma Ala Blanca).
Es la naturaleza el punto clave para iniciar el desarrollo de un punto con fines turísticos, de ahí que es obligado que desde el inicio se considere la conservación del medio ambiente para mantener el ecosistema. El turismo es sustentable y debe seguirlo siendo.
Bajo ese concepto deben orientarse todos los proyectos y desarrollos. Para que ello sea más viable, es la comunidad nativa o asentadas en esas zonas quien debe velar de manera permanente porque la sustentabilidad sea real y no de discurso.
Para ello, los lugareños deben participar en diversas áreas de la cadena turística, pues de esa forma es como se garantiza el concepto y la conservación de esa zona como sitio turístico sustentable.
En Tamaulipas, el sector turístico tiene amplias posibilidades de crecimiento en todos sus campos. Es la línea que ha marcado el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, desde la creación de la Secretaría de Turismo.
Una responsabilidad fuerte para su titular María Isabel Gómez Castro, pues se tiene que dar el salto del turismo playero de los periodos de semana santa y verano a un turismo permanente.
Son casi dos años de la administración estatal y deben empezar a verse resultados en ésta materia más allá de las estadísticas de afluencia a los destinos playeros principales.
Cierto que el problema de la inseguridad que golpea con mayor impacto a algunos municipios de la entidad es una limitante para el turismo.
Pero deben tomarse las medidas necesarias para que el flujo sea más amplio. La tampiqueña acaba de estar en una reunión nacional de Seguridad y Protección a Turistas realizado en Puebla.
El tema central fue promover la cultura de protección a los turistas que visitan los Pueblos Mágicos de México, en donde juegan un papel relevante las policía comunitaria y de proximidad, así como la conformación de alianzas público privada.
Un paso pendiente para nuestro estado, pues al menos una decena de municipios deberían tener Policía Turística.
